Un día después de pedir a Rusia “que se prepare” para un bombardeo con misiles en Siria en represalia por el ataque químico lanzado contra la población de Duma, el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, pareció reducir el tono este jueves al aclarar que no hay fecha para la posible operación.
“Nunca dije cuándo iba a tener lugar un ataque sobre Siria. Podría ser muy pronto o no tan pronto”, dijo el mandatario en su cuenta de Twitter, su canal de comunicación más utilizado.
“De cualquier manera, los Estados Unidos, bajo mi gobierno, han hecho un gran trabajo para sacar al ISIS de la región. ¿Dónde están nuestros ‘Gracias, Estados Unidos’?”, agregó, en referencia al grupo terrorista Estado Islámico (ISIS, por sus siglas en inglés), que fue expulsado de las ciudades sirias e iraquíes en 2017.
Luego de que el régimen sirio lanzara el sábado un brutal ataque con armas químicas contra Duma, en Guta Oriental, que causó al menos 70 muertes, los Estados Unidos y sus aliados comenzaron a analizar la posibilidad de un ataque de represalia contra las fuerzas del dictador Bashar al Assad, aliadas con Rusia.
El embajador de Moscú en el Líbano dijo entonces el martes que su país estaba preparado para derribar los misiles de crucero que pudieran lanzar los Estados Unidos, un arma ya utilizada para un ataque contra Siria en 2017.
En respuesta, Trump desafió el miércoles a Rusia y le dijo que “se prepare”, porque los misiles “van a estar llegando, bonitos, nuevos e ‘inteligentes'”, lo que generó alarma en el mundo y fue interpretado como el anuncio de un ataque inminente.
