Este viernes, el Papa Francisco dio la bendición Urbi et Orbi y concedió la indulgencia plenaria, el perdón de los pecados, en medio de la crisis por el COVID-19.
Desde un atrio instalado en la Basílica de San Pedro en Roma, el sumo pontífice encabezó un oficio que se transmitió a nivel mundial y a la que se conectaron millones de personas, reportó el portal de W Radio.
Tú, Señor, no nos abandones a merced de la tormenta. Repites de nuevo: «No tengáis miedo» (Mt 28,5). Y nosotros, junto con Pedro, “descargamos en ti todo nuestro agobio, porque Tú nos cuidas” (cf. 1 P 5,7). https://t.co/fhYsMGYNKV
— Papa Francisco (@Pontifex_es) March 27, 2020
La oración del Papa Francisco se dirigió principalmente a todos los enfermos de coronavirus, así como los trabajadores de la salud y personas que incluso ofrecen sus oraciones en favor de los afectados.
“En esta barca vamos todos”, dijo el Sumo Pontífice luego de orar ante la imagen de Virgen Santa María la Mayor y el Cristo de San Marcelo que en 1522 salvó a Roma de la peste.
En medio de la lluvia y ante una plaza vacía, debido a las medidas de seguridad que las autoridades italianas han dispuesto para superar la emergencia sanitaria, la oración comenzó con la lectura del pasaje del Evangelio de Marcos (4,35-41), en el que Jesús calma la tormenta en el mar de Galilea, luego de ser despertado por los apóstoles que lo acompañaban en la barca.