El hábito que desarrolló tras ser víctima del bullying provocó un cáncer de piel que obligó a los médicos a retirar su dedo
Australia.– Una mujer tuvo que ser sometida a cirugía para amputar su dedo pulgar a consecuencia de su hábito nervioso de morderse las uñas.
La joven sufrió bullying y de ahí desarrolló el hábito nervioso de morder sus uñas que terminó por desencadenar cáncer de piel y causar la pérdida de su dedo.