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https://youtu.be/N_jhMXw3ho0

En la grabación, se ve que una persona en bicicleta llega a la esquina y espera a dos personas más que van otra bicicleta, presuntamente se trata de Valeria y su padre.

Se aprecia que la menor baja de la parte trasera, mientras que el padre camina al mismo tiempo que sostiene el vehículo.

Es en ese momento, que la combi hace la parada y ambas personas se aproximan al transporte público.

Por estos catastróficos eventos, la oportuna Secretaria de Movilidad del Estado de México suspendió el servicio de las 387 concesiones con las que cuenta la #Ruta40, en la que el hoy occiso Jose Octavio Sanchez, (porque desconocemos hasta la edición de esta nota si el miserable hombre fue tan cobarde para suicidarse) o quizá  su muerte fue necesaria para la continuación de un sistema de justicia corrupto e ineficiente, incapaz de dar respuesta a la ciudadanía, de cuidar a los reclusos, de velar por la seguridad de todos y cada uno de los habitantes que conformamos estas ciudades que hemos construido. Padres y madres de cada familia exigen seguridad para sus hijos.

Edmundo Ranero Barrera, secretario de movilidad, tuvo que salir a dar la cara a los medios y mencionó que hasta el momento han sido remitidos al corralón unicamente 20 unidades de la citada ruta que no cumplían con la normatividad, entre ellas unidades con antigüedad mayor a los 10 años, vidrios polarizados, documentación en regla, choferes sin licencias de conducir.  Por supuesto, como siempre, detalles menores son los que se encuentran pues para las autoridades este es un hecho aislado, que difiere, en otras palabras, que nada tiene que ver  el deteriorado estado social en el que vivimos.

La #Ruta40  ha desaparecido  y quiza el mensaje es que ya “se esta ejerciendo todo el peso y la autoridad de la ley para el cumplimiento de la justicia”.

Valeria, de once años, no lo merecía.