Hasta la fecha, la Universidad de Guadalajara ha detectado 14 casos de la mutación E484K (relacionada con la variante brasileña P.2 del coronavirus SARS-CoV-2) en el estado de Jalisco
A raíz de la detección de cuatro casos confirmados de COVID-19 con la presencia de la mutación E484K en el estado de Jalisco, especialistas médicos, investigadores académicos y expertos en epidemiología han enfatizado la necesidad de profundizar en los estudios científicos para identificar el impacto de las variaciones del coronavirus SARS-CoV-2.
Fue el 27 de enero pasado cuando la Universidad de Guadalajara (UdeG) y la empresa de biología molecular Genes2Life identificaron dicha mutación en cuatro pacientes de Puerto Vallarta y de la zona metropolitana de la ciudad de Guadalajara.
De acuerdo con la institución académica, los casos diagnosticados corresponden a dos mujeres y dos hombres de entre 16 y 78 años, quienes se encuentran estables y no requirieron hospitalización.
Sin embargo, la principal preocupación de los expertos radica en que esta mutación está relacionada con la variante brasileña P.2 del virus. Hasta la fecha, la mutación E484K ha sido encontrada también en la variante P.1, descubierta en Brasil; así como en la variante sudafricana B.1.351.
Según el Instituto Nacional de Diagnóstico y Referencia Epidemiológicos (INDRE), una variante es la “acumulación de cambios en el genoma del virus con respecto al original, ocasionados por diversos procesos de adaptación y que confieren características diferentes que pueden tener impacto en la salud pública”.
Mutaciones en la proteína SPIKE del virus
En el texto “Las variantes de SARS-CoV-2 y la efectividad de las vacunas”, el director de Investigación del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán, Gerardo Gamba Ayala, explicó que las variantes brasileñas, sudafricana y británica coinciden en mutaciones que modifican la proteína SPIKE, la cual hace posible la interacción y entrada del virus a las células de las vías respiratorias.
“Se han reportado ya en varios países y evidencias sugieren que tienen mayor capacidad de infección, porque su unión con la (proteína de las células) ACE2 es más fuerte”, indicó.
Además de los cuatro contagios reconocidos por el INDRE, la UdeG ha identificado a otros 10 pacientes entre mil casos con la mutación E484K, vinculada con la variante brasileña P.2, detalló la jefa del Laboratorio de Diagnóstico de Enfermedades Emergentes y Reemergentes de la institución, Alejandra Natali Vega Magaña.
Impacto de mutaciones y variantes en las vacunas
Para el rector del Centro Universitario de Ciencias de la Salud de la UdeG, José Francisco Muñoz Valle, la mutación E484K, relacionada con la variante brasileña P.2 del coronavirus SARS-CoV-2, preocupa por su impacto en la eficacia de las vacunas contra COVID-19, ya que, señaló, se ha vinculado con una reducción de la neutralización del virus de hasta 10 veces.
“Lo que pudiera pasar es que las vacunas tuvieran una menor eficacia o que se presenten reinfecciones, pero faltan estudios para verificar en qué medida puede bajar la eficacia de la vacuna”, puntualizó.
Dos artículos publicados por la revista estadounidense especializada “New England Journal of Medicine” revelaron que las vacunas de Pfizer y Moderna neutralizan tanto al virus original como a la variante británica B.1.1.7; sin embargo, su eficacia se reduce a la mitad frente a la variante sudafricana.
“Esto es lo que se teme que pueda ocurrir con el SARS-CoV-2 ahora que han iniciado los programas de vacunación. Si surge una variante que no pierda la capacidad de infectar, pero no sea reconocida por los anticuerpos neutralizantes, por selección natural se convertiría en la predominante a lo largo del tiempo, podrá infectar a quien ya se ha vacunado y obligaría a generar nuevas vacunas”, destacó el director de Investigación del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán.