Este lunes, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) informó que habilitará dos nuevos puertos de entrada a USA desde México para los solicitantes de asilo. Con esto, pretende aumentar la cobertura del registro de estos migrantes que solicitaron protección por medio del programa “Quédate en México”.
El DHS planea comenzar a recibir a los solicitantes de asilo varados en México a partir de esta semana. Los solicitantes entrarán por el Puente Internacional Gateway de Brownsville, Texas. También se permitirá su paso en el puesto de entrada Paso del Norte del mismo estado, según informó la Casa Blanca.
Estos puertos se sumarían al de San Ysidro, California, que ya está habilitado desde el viernes pasado.
USA continúa procesando los casos de asilo
El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) de la ONU adelantaron que se comenzarán a recibir migrantes por estos puntos fronterizos entre USA y México el próximo 26 de febrero.
Además, el DHS detalló que está trabajando junto a sus socios “en ambos lados de la frontera” para comenzar el procesamiento de nuevas solicitudes “lo antes posible”.
Por el momento, sólo se podrán beneficiar aquellos migrantes cuyas solicitudes de asilo ya están aprobadas. También se recibirá a quienes ya tienen una cita después de haber realizado su registro virtual.
La Casa Blanca advirtió que aquellos que no cumplan con estos requisitos deben abstenerse de acercarse a los puertos de entrada designados. Y es que, debido a la pandemia, las restricciones de viaje en la frontera entre USA y México siguen vigentes. Por lo tanto, quienes no cumplan con este perfil serán expulsados de inmediato.
“La presencia física en un puerto de entrada no es la forma de acceder a este esfuerzo escalonado para reducir el programa MPP”, citó la institución.
Por otro lado, las personas procesadas a través de este programa también se someterán a pruebas de Covid-19 antes de ingresar a Estados Unidos.
Actualmente, los Departamentos de Estado y Seguridad Nacional se están coordinando con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de USA. También están sumando esfuerzos con el gobierno mexicano y organizaciones internacionales para garantizar que el programa cumpla plenamente con las órdenes de salud federales, estatales y locales.