Durante esta cuarentena, una gran cantidad de personas se han descubierto comiendo por ansiedad y/ o depresión, lo cual puede ser nocivo para la salud.
Comer por ansiedad puede dejar secuelas importantes, así como malos hábitos que deben ser corregidos para evitar complicaciones como sobrepeso y obesidad.
Por ello, compartimos algunas recomendaciones de expertos en alimentación.
Para empezar, piden que no te sientas culpable, ya que es un tipo de comportamiento bastante habitual cuando se trata de situaciones de tensión.
Por otra parte, dormir bien también te ayudará a sentirte mejor contigo misma; la necesidad de comer por ansiedad cederá de forma importante.
Es importante que pienses en la comida dentro del espectro de una dieta balanceada, no te enfrasques dentro de lo “bueno o lo malo”. Dale prioridad a las porciones.
Debes mantenerte activa y en constante contacto con tus seres queridos; también se sugiere que no te prives de la comida.