Kristine y Michael Barnett están siendo acusados de abandonar a su hija con enanismo en Estados Unidos para mudarse ellos con sus hijos biológicos a Canadá.
De acuerdo con el Washington Post, la pareja adoptó a una ucraniana en 2010, que se calculó en ese momento tenía ocho años, aunque otro médico les dijo que 11, un año más de lo que indicaban los documentos oficiales.
Para 2012 la pareja cambió legalmente la edad de la niña a 22 años y le alquiló una propiedad en 2013 en la localidad de Lafayette, en el estado de Indiana. Entonces la familia, los padres y sus tres hijos biológicos, se mudaron a Canadá, y dejando a la niña sola y sin apoyo financiero.
En 2014 la policía inició una investigación. Ahora Kristine dice que la adopción fue un ‘fraude’ porque la niña ya era adulta.
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Presenta como prueba una carta de un médico en la que se refiere a los registros dentales de la niña, a su desarrollo sexual adulto y lo que llama un trastorno antisocial de personalidad que padecía.
El especialista afirma que la niña en realidad tenía más de 18 años en 2011 y que ella fue partícipe del fraude, aunque la autenticidad de dicha carta sigue sin poderse comprobar.
No obstante Michael cuenta otra historia y asegura que la niña era menor de edad cuando la pareja la dejó sola en Estados Unidos, y culpa a su exesposa de enseñarle a la niña a mentir que tenía 22 años y explicar que solo parecía ser más joven.
Si bien no se sabe cómo sobrevivió la chica todo ese tiempo sola, por ahora se desconoce con certeza su paradero, pues se le regresó a Lafayette en 2016, mientras la pareja de padres está siendo acusada por negligencia.
A su vez Kristine Barnett ya escribió y publicó un libro sobre la crianza de un hijo genio, Jacob Barnett, un niño prodigio con autismo que a los 12 años comenzó el proyecto de una versión ampliada de la teoría de la relatividad de Einstein.