Aunque hay muchos animales que se les enseña a no pedir comida a los humanos y solo comer su propio alimento, hay otros que jamás lo aprenden… y en cualquier oportunidad en que su dueño se distraiga, no dudarán en probar alguno de los bocados de su plato.
El problema, es que si su humano se llega a dar cuenta, de seguro la reprimenda no la olvidará jamás, por eso, como son inteligentes, saben que tienen que ser lo más rápidos y disimulados posibles para no levantar sospechas.
Así lo estaba haciendo este gatito cuando encontró sobre la mesa un delicioso plato de espinaca que estaba por comer su dueño, pero que por algún motivo se paró de la mesa y lo dejó allí para comerlo luego… sin imaginar que el felino estaría al acecho, como muestran las imágenes.
Más veloz de lo habitual, el gatito se acerca al plato listo para darle un enorme bocado, cuando de pronto siente los pasos de su dueño cada vez más cerca, y como tiene claro lo que significaría ser descubierto, prefirió huir disimuladamente… sin antes poner una cara de impacto épica.
Así, cuando el hombre llega a la mesa a sentarse, el gato no está por ningún lado… ah no, esperen… está escondido dentro de un balde, disimulando por completo sus extremas ganas de probar la espinaca.
Una vez que las imágenes fueron compartidas, varios usuarios dudaron de su veracidad… sin embargo, todos se sintieron identificados con la actitud del felino cuando queremos robarle la comida a otro y están a punto de descubrirnos.
Mira aquí su épica reacción (y no lo niegues, también reaccionas igual):
Source: UPSOCL