“Sí, mi amor, es simulacro, abajo. Pero en los simulacros tenemos que cantar, así que pecho tierra. Tenemos que ensayar, ya sabes; son ensayos que tenemos que hacer. No, mi amor, no pasa nada. A ver, abajo, acostaditos todos”. Con estas palabras una maestra, de identidad desconocida intentó engañar a los niños que yacían al interior del aula de clases, asegurándoles que debían llevar a cabo un simulacro de emergencia.
Les ordenó que permanecieran recostados en el suelo y los incitó a cantar una canción que habían aprendido en las semanas anteriores. Sin sospechar absolutamente nada, los pequeños se arrojaron al suelo y comenzaron a cantar fuertemente, situación que fue filmada por la profesora, quien envío el video a los padres para demostrarles que sus hijos estaban a salvo del tiroteo que ocurría en las afueras del establecimiento.
El peligroso hecho ocurrió el pasado 12 de enero en el Colegio Occidente de Ciudad Obregón, en donde a menos de un par de metros del recinto educacionales dos personas fueron asesinadas por individuos armados, quienes fueron detenidos por la policía local por el delito de homicidio.
La maravillosa iniciativa que tuvo la profesora para calmar a los pequeños se volvió viral a través de redes sociales, en donde decenas de usuarios celebraron la decisión tomada por ella en una situación tan extrema como el tiroteo que tuvo lugar en las afueras del jardín.
Lamentablemente el video no representa una situación aislada, ya que personal policial de México ha tenido que lidiar con situaciones de similares características, las cuales han tenido lugar en locaciones contiguas a centros educacionales.
Source: UPSOCL
