La obsesión por marcar el abdomen y lucir un vientre plano y tonificado puede hacer que pienses que debes entrenar los abdominales todos los días. Sin embargo, puedes obtener el efecto contrario y, además, supone ciertos riesgos.Las principales razones por las que hacer abdominales todos los días pueden llegar a dar resultados totalmente opuestos a los esperados.

En primer lugar puede sufrir sobre entrenamiento o sobrecargas, se puede llegar a deteriorar la masa muscular abdominal al someterlos a un estrés constante, también puede generar una descompensación con los lumbares y producir dolor en la parte baja de la espalda, se puede producir una mala recuperación y una disminución del rendimiento en la próxima sesión.

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No solo hacer ejercicios abdominales todos los días puede provocar problemas posturales, sino también desequilibrios musculares. Un mejor enfoque sería ejercitar tus abdominales intensamente 2-3 veces por semana usando circuitos para obtener un excelente entrenamiento de abdominales en mucho menos tiempo.

Los abdominales son un grupo muscular como cualquier otro, por lo que necesitan tiempo de descanso y recuperación para crecer, por tanto, al igual que pasa con el resto de los músculos, no es una buena estrategia trabajar a diario los abdominales, si lo que buscamos es mejorar el tono muscular de la zona.

Lo idóneo sería trabajarlos un día sí y otro no, dejando un margen de descanso de 24 horas o superior, y no establecer más de tres sesiones específicas a la semana,  además, es importante tener en cuenta que en la mayoría de ejercicios funcionales, como las sentadillas, el peso muerto o las flexiones, los abdominales trabajan ejerciendo como músculos estabilizadores del cuerpo.

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Por otro lado, muchas personas tienden a hacer grandes cantidades de abdominales pensando que así eliminarán de una forma rápida la grasa corporal de su abdomen. Grave error, ya que es imposible eliminarla de forma localizada, una dieta saludable y un déficit calórico se hacen indispensables para empezar a perder la grasa distribuida por el cuerpo.

En definitiva, se puede desmentir el mito que dice que es necesario hacer abdominales a diario para poder lucir un vientre plano y perfecto, y mucho menos para perder grasa. Hay que trabajar los abdominales e incluir trabajo específico en nuestras rutinas ya que trabajarlos todos los días, puede llegar a ser contraproducente y alejarlo de los objetivos y propósitos que tiene.