Dragon Ball Z y sus secuelas nos cuentan la historia de Gokú y Vegeta, dos guerreros de una especie guerrera extinta, quienes fueron borrados de la historia por el Emperador del Mal, Freezer. Por esta razón, conocemos poco de cómo vivían los saiyajin, cuáles eran sus costumbres, en qué creían o quién fue el primer guerrero saiyajin de la historia.

De hecho, sobre este último aspecto conocemos algo, no mucho, pero algo, ya que el primer saiyajin de la historia se llama Yamoshi y, a pesar de que todos creían que era un mito, es parte del cañón de Dragon Ball Z, según Akira Toriyama, el verdadero padre de Gokú y los Guerreros Z. Hoy te contaremos la historia de Yamoshi.

El nombre de este guerrero proviene de la palabra japonesa moyashi, que significa brotes de soja verde, y sigue la tradición de Akira Toriyama de nombrar a los personajes de este universo como ciertas frutas y verduras.

De acuerdo con el canon de Dragon Ball Z, Yamoshi era un guerrero de corazón puro, quien llevó a cabo una rebelión para eliminar la maldad de su especie. Sin embargo, no tuvo el éxito que él hubiera querido y fue asesinado después de haber sido acorralado por otros guerreros saiyajin.

Más tarde, volvió a la vida como Super Saiyajin Dios, una transformación a la que pueden acceder los super saiyajin de corazón puro, luego de llevar a cabo un ritual donde seis guerreros de esta especie se toman de la mano para invocar el poder de Yamoshi.

El mito de Yamoshi, el super saiyajin Dios original, fueron la razón por la que Freezer llevó a cabo el genocidio de los saiyajin, pues tenía miedo de que otros guerreros de esta especie conocieran una manera para invocarlo.

La primera vez que vimos a Yamoshi fue en un episodio de Dragon Ball Z, cuando Vegeta tiene un flashback donde ve a un enorme mono dorado.

Al ser el primer saiyajin, su poder era increíble, y al igual que el resto de guerreros que consiguieron convertirse en saiyajin, su poder se volvió inconmensurable. Además, tal y como sucede con otros saiyajin, Yamoshi podía convertirse en un mono gigante de pelo dorado. No se sabe si Yamoshi tenía un aspecto humano, como los demás saiyajins.