Si recientemente te has convertido en el nuevo dueño de un gato bebé, sabrás que representa toda una nueva aventura de vida. Y probablemente te han surgido muchas preguntas respecto a sus cuidados y a su bienestar. Estarás todo el tiempo preocupado acerca de si se encuentra sano y listo para moverse por el mundo. Todos las mascotas necesitan de atención veterinaria profesional, pero de acuerdo con Whiskas, existen algunos aspectos que puedes observar en casa y que te indicarán que tu gatito se encuentra saludable.

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1. Desprendimiento correcto de su madre

Lo ideal es que un gato se desprenda de su madre, para vivir en un nuevo hogar, hasta después de que tenga dos meses de vida. El contacto entre madre y gatito es muy importante, es clave para que todo minino desarrolle los instintos básicos que utilizará durante toda su vida y de ahí obtiene el alimento que lo ayudará a desarrollar sus órganos adecuadamente. 

También es muy positivo que un gatito haya convivido con sus hermanos y hermanas y de camada, pues de esta manera aprende los comportamientos normales de un gato. Además, la socialización ayuda a que crezcan seguros y confiados. 

2. Destete

Antes de adquirir un nuevo cachorro, asegurate de que cuente con al menos dos semanas de destete, lo que quiere decir que ya no depende de la leche de su madre. Y significa que ya puede valerse por sí mismo para alimentarse y que ya es completamente activo. 

3. Ojos saludables

Los ojos de un gatito deben lucir claros y limpios. Sin manchas, lagañas ni enrojecimiento. Estos últimos signos, al igual que ojos opacos, suelen estar relacionados con enfermedades oculares. 

4. Revisar sus heces

No olvides revisar que tu gatito no tenga restos de heces pegados a su cuerpo y que tampoco sean poco sólidos, pues este último puede ser un signo de diarrea. La diarrea es muy peligrosa en gatos bebés, porque indica que no cuenta con la nutrición y fortaleza necesarias para crecer y puede causar deshidratación. La deshidratación puede resultar en padecimientos más graves y es mortal. 

5. Dientes y encías

Un gatito necesita tener todos sus dientes desarrollados para poder alimentarse por sí solo, y desprenderse de su madre en el momento adecuado. Estos no deben estar descoloridos ni tener objetos extraños como pedazos de hilo o cuerda. También revisa sus encías. Estas deben verse rosadas y sin hinchazón. 

6. Nariz húmeda

Lo ideal es que su nariz permanezca húmeda y blanca, sin caer en el exceso de que este llena de goteos o mucosidad. Un exceso de humedad en la nariz es síntoma de problemas respiratorios. 

7. Aliento

Si el aliento de un gatito huele muy mal, probablemente padezca de un problema dental o gastrointestinal. 

8. Orejas

Deben estar limpias y no tener olor. La presencia de la cerilla es normal, siempre que no parezca excesiva a simple vista. Si ves que tu gatito mueve mucho su cabeza y se rasca las orejas o las frota, porque claramente algo le molesta, consulta a un veterinario. 

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9. Piel y pelo

La piel debajo de su pelito debe ser rosada; no roja, ni pálida ni escamosa, seca o grasosa. En cuanto al pelo, lo dial es que esté libre de nudos y que cuente con un brillo sutil.