A lo largo de tu vida vas a tener relaciones que te enseñen lo que sí se debe hacer como pareja y lo que definitivamente jamás debes tolerar, también te enamorarás equivocadamente, pero debes aprender que hay que dejar de insistir con personas que nos quieren, soltar a aquellas que en lugar de sumarte, te restan y te roban energía.

Puede resultar complicado alejarte de quienes amas, de quienes en algún momento formaron parte importante de tu vida y que pensaste que siempre estarían contigo, pero hay que dejar de insistir con personas que no nos quieren, solo así podremos guardar ese espacio para quienes sí están dispuestos a entregar todo con tal de ser felices a nuestro lado.

Hay que abrirles la puerta a esas personas que ya no quieren estar en nuestra vida, que te gritan con su silencio y su falta de acciones que no están cómodos a tu lado, hay que romper con esas relaciones no nos sirven, que no nos aportan, que solo nos llenan de miedo, hay que elegir ser felices sin depender de nadie más, hay que vivir rodeados de paz.

Cuando el amor llega a tu puerta, puedes enamorarte perdidamente, dar la mejor versión de ti a esa persona y aún así él elija irse de tu lado porque se ha dado cuenta que contigo no está lo que él buscaba, eso puede sonarte demasiado cruel, no lo aceptas, no lo digieres y te aferras a la idea de que puedes cambiar su percepción si te esfuerzas un poco más.

En lugar de dar el 100 %, das el 200 % por esa relación en la que ya solo estás luchando tú, porque él ya te dejó claro de una u otra manera que no ve su futuro a tu lado, pero ¿qué estás ganando? solo te estás desgastando en algo que ya no tiene de dónde sujetarse, te estás quedando sin energías, mientras que él solo ve los esfuerzos que haces, pero no mueve un solo dedo para respaldarte.

Es ahí cuando tú debes tomar la decisión importante en la que tienes dos caminos, abrir los ojos, ponerte a ti como prioridad y aprender a soltar por más doloroso que resulte, o quedarte a su lado siendo infeliz y sin una sola demostración de amor, en un lugar en donde dará lo mismo si te vas a te quedas, deja de insistir, recoge tu dignidad.

Lo mismo pasa cuando te obsesionas con alguien que no te ha dado alas, que te ha dicho que no quiere ni una aventura, ni nada serio contigo, pero que aún así tú quieres encajar a como de lugar en su vida, sin darte cuenta pierdes todo delante de esa persona, tu dignidad, tu valor, el respeto por ti misma, porque eres incapaz de darte cuenta lo valiosa que eres como para rogar por migajas de amor.

Es tiempo de dejar de insistir con personas que no nos quieren, que solo les gustan los beneficios que pueden obtener a nuestro lado, ese buen trato, pero que no están dispuestos a un compromiso, que no se atreven a dejar en claro qué es lo que quieren, es tiempo de dar la media vuelta y alejar del círculo cercano a todas esas personas que solo buscan absorber amor, empatía, pero sin dar nada a cambio.