El hecho de que haya “reglas de una dieta saludable”, no se trata de exigir demasiado para que tengan el plan de alimentación más restrictivo de la vida. Algo que hay que dejar claro es que comer saludable no implica que te privarás de comer muchas cosas.
Y aquí te dejamos por eso algunas recomendaciones que no puedes dejar pasar si quieren mantenerse fit y sobre todo, si quieren estar sanos en todos los aspectos.
El término dieta, se refiere en realidad a toda la ingesta de alimentos que tienes en un día, por lo que aquí nos referiremos a este término como un plan de alimentación con alguna restricción calórica o de ciertos nutrientes para lograr un peso saludable.
Una revisión sistemática que vio la luz el año pasado en el British Medical Journal por Long Ge y cols. cuyo objetivo fue analizar la efectividad de 14 tipos de dietas para garantizar la pérdida de peso y evitar el riesgo cardiovascular de personas con sobrepeso u obesidad, concluyó que la mayoría de estas personas obtuvo una modesta pérdida de peso (de 4 a 5 kilos) a los 6 meses pero eso sí, mejoraron sustancialmente factores de riesgo para la enfermedad cardiovascular como la presión arterial. Pero a los 12 meses, prácticamente, ambos efectos desaparecieron. Esto quiere decir que si haces dieta tendrás los efectos a corto plazo, pero a la larga, al momento en que la frenes o abandones, lo beneficios se perderán por completo.
Entonces lo que se tiene que hacer es enfocarse en lo que se comes día a día y no en lo que no comes o dejas de comer como pasa cuando se está a dieta. Para ello, busquen los “platillos inteligentes” que aunque no lo creas en la cocina mexicana hay bastantes, tales como el pozole, los sopes, la enchiladas, los tacos.
Y son “platillos inteligentes” porque en una sola comida puedes integrar los 3 grupos de alimentación: frutas o verduras, cereales o tubérculos y leguminosas o productos de origen animal.
Variedad
La alimentación además de heterogénea deberá ser versátil. Busquen que su dieta tenga variedad en todo aspecto. Así como las dietas muy estrictas o de eliminación, el hecho de que la alimentación sea muy monótona no es la opción más saludable. A parte de aburrida, literalmente en cuanto a sabores, colores y texturas, se convierte en el tiempo en una nutricionalmente deficiente.
En esta segunda recomendación también contemplen la opción de dar prioridad a los productos naturales, ya que si compran o comen muy procesado no podrán hacer mucho en cuanto al tipo de preparaciones pero, si compran los ingredientes frescos tendrán un mundo de posibilidades en cuanto a los platillos, y también, chequen que una dieta diversa abre la posibilidad de obtener nutrientes de diversas fuentes.
Proteína
Muchos se preocupan por los carbohidratos o las grasas que comemos y no está mal ya que de estos macros depende mucho la aparición de ciertas enfermedades. Pero, otra vez, seguimos entrando en la idea de enfocar nuestra energía en lo ‘malo’ o lo que supuestamente nos hace daño y no en lo que podría ser de más beneficio para nuestra salud.
Uno, son nutrientes estructurales en nuestro cuerpo entonces todo lo que hay de tejido tiene proteína y esto obviamente ejerce su función en etapas de desarrollo, crecimiento y mantenimiento o la reparación.
Dos, “todas las enzimas son proteínas, pero no todas las proteínas son enzimas” y con esto, la función principal de las enzimas es catalizar las reacciones bioquímicas que mantienen nuestro metabolismo.
Tres, la mayoría de las hormonas son de naturaleza proteica que actúan como mensajeras químicas y además, entre otras funciones nos ayudan a mantener el balance de fluidos, el pH, forman moléculas del sistema inmune así como sirven de transporte y de almacenamiento de nutrientes.
Y también se podría decir que mantienen o hacen que ganes masa muscular, esto ayudará a que el día de mañana en la vejez, un correcto aporte de este nutriente ayudará a proteger los huesos, a mantener la movilidad y evitará que sufran de sarcopenia. Así que como recomendación metan además de la carne, proteína de origen de pescado rica en vitamina u omegas 3, la de las leguminosas ricas en fibra, potasio o magnesio, la de las semillas ricas en grasas saludables, la del huevo que es la más rica en aminoácidos o hasta la de los lácteos que también es e alto valor biológico.
GQ.