Desde los 25 años inició su labor de ayuda en instituciones de emergencias
Por Josefina Herrera
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“No me imagino la vida sin ayudar”, expresó Mauricio Pérez Zarco, delegado de la Cruz Roja Mexicana en Tequisquiapan, quien compartió desde cuando nació su vocación de servir.
Narró que lleva cerca de 22 años con esta labor de servicio dentro de instituciones de emergencia y apoyo a otras organizaciones, lo que ha dado lugar a grandes satisfacciones y experiencias que han marcado su vida.
Sus inicios fueron en Bomberos cuando tenía 25 años de edad, y contaban con tan sólo un camión para brindar apoyo en las emergencias que se iban presentando, unas instalaciones más pequeñas y un equipo de voluntarios muy reducido.
Contó que desde muy pequeño nació en él este interés por servir y contribuir en el bienestar social, motivo que lo orilló a ingresar a este cuerpo de emergencias.
“Yo tenía como seis, siete años de edad, y había como 20 mil habitantes, pues nos conocíamos a todos, yo estudié aquí, todos mis amigos, veía barrios y zonas que estaban muy necesitadas, y desde esa época nuestros juguetes que eran usados, nuestra ropa que ya no estaba en muy buen estado íbamos y la regalábamos a personas que encontrábamos que tenían necesidades. Cuando nosotros tenemos esta programación se nos vuelve como un hábito, es como el respirar, yo no me imagino pasando por esta vida en este momento, y aunque ya no con la Cruz Roja, te puedo decir que apoyo a muchas organizaciones”.
Con este contexto, compartió que desde ahí comenzó a sentir esta inquietud, y que es algo que puede decirse, se trae en el ADN, y aunque también ha implicado sacrificios, los logros han sido mayores.
“Digamos que se cierran unas puertas pero se abren otras, o te enfocas un poco más, pero está en nuestro ADN, está en nuestra programación, no me imagino la vida sin ayudar, y cada día más yo siento que venimos a este mundo a trascender para poder ser mejor persona, para evolucionar”.
Respecto a su ingreso a la Cruz Roja Mexicana, mencionó que se le hizo la invitación en el 2019 para estar al frente, y que de este año a la actualidad, considera que se ha notado un gran cambio.
Dentro de sus acciones en esta etapa, dijo, pudo poner en orden la estructura del personal, la gestión de otra ambulancia, equipar las unidades que se tenían y oficinas, mejorar la infraestructura y construir un aula al interior de sus instalaciones.
“De hecho ganamos el premio del primer lugar a la mejor Cruz Roja administrada, ahí entonces tomé esa experiencia para para enfocarnos un poco al tema de la capacitación, buscamos quién sumara a un proyecto de la construcción, de los materiales de esta pequeña aula que se ve aquí, y lo logramos, y ahora pues estamos dando más cursos”.
Aunque también le tocó pasar por momentos complicados como una pandemia y una inundación, sostuvo, siempre hubo un gran compromiso por parte de todo el equipo para salvaguardar la vida de los tequisquiapences.
Mauricio Pérez Zarco, está por entregar la delegación, pero menciona, que esta labor de servicio no termina aquí, y aunque se enfocará en ver qué rumbo tomar, no dejará de apoyar desde otro lado de la trinchera.
Finalmente, agradeció a quienes forman parte de la Cruz Roja Mexicana Tequisquiapan, por haber hecho equipo con él y que en este tiempo se lograra fortalecer a esta institución.
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