Arturo Nahle y Mario Córdova están inaugurando un nuevo Centro de Atención Familiar (CECOFAM). Hasta ahora, ya existen dos Centros en Fresnillo y Jerez, pero este mes se abrirán otros cuatro en Río Grande, Sombrerete, Jalpa y Tlaltenango.
En Río Grande, el Magistrado Arturo Nahle García, quien es el Presidente del Tribunal Superior de Justicia, y el Presidente Municipal, Mario Córdova Longoria, han abierto un nuevo Centro Regional de Convivencia Familiar Supervisada (CECOFAM).
Acordaron colaborar mediante la firma de un convenio en el que se otorgaba al Tribunal la responsabilidad de tener la posesión y encargarse de la administración de la planta alta del DIF municipal.
El Centro de Atención Familiar (CECOFAM) ofrecerá atención a alrededor de 125 mil personas que viven en los municipios de Río Grande, Francisco R. Murguía, Miguel Auza y Juan Aldama.
El juez Nahle señaló que se realizarán encuentros supervisados según lo dictaminado por los cuatro tribunales que se encuentran en ambos distritos judiciales.
El objetivo principal es garantizar que los padres que no tienen la custodia de sus hijos puedan pasar tiempo con ellos y ejercer su derecho a convivir juntos. Además, se busca promover la reconstrucción de los vínculos de amor y comprensión entre ellos.
Este texto habla sobre niños y adolescentes cuyos padres están separados o en proceso de divorcio. En estos casos, se ha establecido que el padre o la madre que no tiene la custodia pueda pasar tiempo con ellos, pero siempre bajo la supervisión de profesionales como psicólogos, trabajadores sociales, médicos y abogados.
Las entregas y recepciones de menores se realizarán en el CECOFAM, donde podrán llevar a cabo encuentros abiertos fuera del Centro, conocidos como convivencias abiertas.
En situaciones similares, los médicos tendrán que confirmar el estado de salud en el que los padres no custodios reciben a sus hijos y el estado en el que los devuelven.
En términos generales, expresaron su preocupación por el creciente conflicto en las familias, ya que es evidente que la institución familiar, que es fundamental para cualquier sociedad, está experimentando un deterioro.
