Muchas de las personas que tenemos un tatuaje, probablemente nos hayamos preguntado cómo ha avanzado este peculiar arte sobre la piel a lo largo de los años. Por supuesto, es más que deducible que no siempre se hayan usado las mismas tintas, agujas, y maquinaria en general para dejar una marca en la piel; también es lógico pensar que, a lo largo de las civilizaciones, los tatuajes no han tenido siempre los mismos significados.
Para todos que se hayan hecho esas preguntas, es un placer comentarles que el Museo Británico, descubrió tatuajes en dos momias conservadas naturalmente. Según los datos oficiales que arrojaron los tests, las personas que los llevaban encima parecen haber vivido entre el 3351 y el 3017 a.C.
En una momia masculina, se encontraron tatuajes cuyas imágenes buscan representar a un toro y una oveja. Estos estaban ubicados en la parte superior del brazo del sujeto de estudio; mientras que, en la momia identificada como una mujer, los tatuajes eran algo más sencillos: trazos de una sobria línea, y otro con la forma de una “S”. También estaban ubicados en la parte superior de su brazo.
La momia masculina, conocida como el Hombre de Gebelein A, ha estado en exhibición desde que fue descubierta, hace cerca de 100 años. Según pruebas de huella de carbono, Gebelein A murió entre los 18 y los 21 años, por una herida hecha con un arma cortopunzante en su espalda.
Hasta el día de hoy, sus brazos habían permanecido sin examinar. El solo hallazgo de su cuerpo significaba un increíble avance para la ciencia, y las marcas que llevaba en la piel, llevaron a los investigadores a pensar que solamente eran manchas, pero gracias a la fotografía infrarroja, lograron caer en la cuenta de que eran figuras animales.
Según algunas investigaciones sobre la época, los pigmeos usaban hollín para hacer sus tatuajes.
En cuanto a la momia femenina, conocida como mujer de Gebelein, tiene una serie de tatuajes. Las “S” pasan por su hombro derecho, hasta bajar por su brazo, donde las marcas terminan con una línea recta. Según los investigadores, los motivos lineares podrían haber representado poder y estatus.
Se piensa, también, que ambos tipos de tatuajes, al ser altamente visibles, habrían demostrado jerarquía, conocimiento culto, o mágico, y protección.
Hasta ahora, los tatuajes más antiguos jamás descubiertos, estaban en Otzi, una momia alpina que habría vivido entre el 3370, y el 3100 a.C.
Source: UPSOCL