Han pasado 11 años desde que se le perdió el rastro a la pequeña Madeleine McCann, una niña que desapareció de la habitación en la que dormía con sus dos hermanos en un complejo turístico del Algarve, sur de Portugal, en mayo de 2007, cuando tenía tres años de edad.
Si bien el caso escaló a la prensa mundial y han testificado un montón de personas en calidad de testigos, aún no se sabe absolutamente nada de lo que ocurrió esa noche con la pequeña, así que la investigación -en la que se han gastado más de 11 millones de libras- aún no ha terminado.
Aunque algunos pensaban que ya era tiempo prudente de darla por finalizada, durante estos días el Ministerio del Interior del Reino Unido aprobó la solicitud de la policía para invertir más dinero en la búsqueda de la niña, lo que mantendría la investigación activa por al menos 4 meses, hasta marzo de 2019.
Esta vez se podrán utilizar 150 mil libras para continuar uniendo cabos sueltos hasta descubrir qué ocurrió con Madeleine.
De acuerdo al portavoz de la familia McCann, los padres de la menor -Kate y Gerry- están profundamente agradecidos por la decisión tomada, sobre todo ahora que hay estrictos recortes gubernamentales, pues los mantiene con esperanza que la policía crea que todavía hay trabajo que hacer en la búsqueda de su hija luego de que la investigación portuguesa no lograra avanzar.
Sin duda que este es uno de los casos sin resolver más importantes en el Reino Unido, pero ni los padres ni las autoridades británicas han bajado los brazos y siguen con esperanzas de encontrar a la pequeña. Es más, durante los último años los detectives tradujeron y analizaron 40.000 páginas de documentación generada por la policía portuguesa en la investigación inicial, indagaron a unas 600 personas consideradas “de interés” y evaluaron supuestos avistamientos de la menor en países de todo el mundo para intentar dar con algún resultado, pero no ha sido posible hasta el momento.
Source: UPSOCL