La incomunicación fue tal que los medios internacionales incluso creyeron que la capital metropolitana había desaparecido por completo.
Además, las fallas eléctricas y los daños sufridos en Televicentro, que en ese momento era la única cadena de televisión en la ciudad, convirtió a la radio en el medio más eficiente para mantener a la población informada.

En contraste con el 2017, donde las cadenas de televisión y las redes sociales como WhatsApp, Facebook, Twitter y Google, fueron herramientas valiosas para saber cómo estaban nuestras familias.
Fue hasta las 16:00 horas, de ese 19 de septiembre del 85, cuando el presidente Miguel de la Madrid recorrió por primera vez las zonas afectadas. El primer mensaje a la nación lo dio tres días después y meses más tarde, el mandatario fue abucheado durante la inauguración de la Copa Mundial México 86.

A diferencia del presidente Enrique Peña Nieto, quien en 2017 atendió la emergencia de inmediato.
El mandatario se encontraba apunto de aterrizar en Oaxaca, cuando al saber del sismo, ordenó regresar a la Ciudad de México para llevar a cabo un sobrevuelo y evaluar la situación. Asimismo, dio la orden de evacuar los hospitales afectados y puso en marcha el Plan MX, “una herramienta para coordinar y articular en el país la respuesta de todas las instancias del gobierno de la República ante una emergencia”.

En punto de las 19:15 horas de ese mismo día, Peña Nieto dio un mensaje a la comunidad mexicana a través de su cuenta de Facebook sobre los hechos ocurridos.

Por su parte, el apoyo de la comunidad internacional no se hizo esperar, sin embargo, en el 85, De la Madrid la rechazó al no considerarla necesaria y prohibió la participación militar en maniobras de rescate. Posteriormente se retractó y aceptó el apoyo. 
Pero 33 años después, la historia fue muy distinta pues Peña Nieto aceptó y agradeció desde un principio la ayuda que provino de 27 países alrededor del mundo, Alemania, Argentina, Bolivia, Canadá, Chile, China, Colombia, Costa Rica, Cuba, Ecuador, Japón, España e Israel fueron sólo algunos que se unieron para darnos apoyo técnico, financiero y en especie.
Además, el apoyo militar fue vital. La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) desplegó a 3 mil 677 elementos del Ejército y la Marina en distintas delegaciones de la CDMX, movilizando también, ocho helicópteros y seis equipos de maquinaria pesada y 15 binomios caninos de donde surgió la famosa perrita Frida y sus inolvidables compañeros Evil y Eco.