Nos enamoramos por primera vez y aseguramos al universo que nunca más en la vida volveremos a sentir por nadie más esas mariposas que se apoderan de nuestro estómago y esa explosión de amor incontrolable. Pero ¡sorpresa! Para alegría de unos cuantos que acarrean un corazón roto esto no es así. El amor es infinito nace y renace y se posa en distintas personas que se cruzan en nuestras vida.
1. Te sientes afortunado porque al principio te preocupaba que nunca sucediera de nuevo.
2. Tus ojos están abiertos. No eres un pequeño inocente que entrega su corazón de forma gratuita. Ahora ya conoces los riesgos reales del amor y lo doloroso que puede llegar a ser cuando lo pierdes.
3. La primera vez que amaste y perdiste a alguien pensaste que nunca más lo superarías. Pensaste que aquella persona sería la única en el mundo para ti y que nunca encontrarías a alguien igual. Ahora por fin te has dado cuenta de que no es así.
4. Intentas ser amable durante las peleas (porque sí, hay peleas). No importa tanto “ganar” la discusión, sino resolver el problema y hacer que las cosas funcionen mejor entre los dos.
5. Te das cuenta de que los “felices para siempre” sólo se ven así desde el exterior. Lo que necesitas es elegir a una persona a quien sigas queriendo después de que las hormonas y las “mariposas” desaparezcan.
6. Ya no compartes tantas expresiones de amor en las redes sociales. Eso lo hacías antes para probar algo, porque estabas muy emocionado por estar enamorado y que alguien te amase de vuelta. Ahora ya sabes que el amor no se trata de demostrar nada a nadie. Es sólo para ti.
7. Puede que no seas el novio o la novia perfecta, pero eres consciente de las cosas que necesitas tratar de mejorar. Tal vez eres demasiado celoso y molestas a tu pareja a causa de eso. No vas a cambiar de la noche a la mañana, pero estás tratando de ser más confiado y de entender que, sentir un poco de ansiedad y vulnerabilidad, está bien.
8. Te enamoras más lentamente esta vez, más deliberadamente. No tienes apuro y no quieres enamorarte de cualquier persona. Quieres asegurarte de que ocurra con alguien que vale la pena.
9. Ahora te das el tiempo de conocer de verdad a esa persona. Es alguien que agrega valor a tu vida, alguien que es maduro e interesante y que tiene mucho más que ofrecer que sólo “diversión”.
10. Te das cuenta de por qué suceden algunas cosas malas. Si tu primer amor no hubiera terminado, no te habrías dado cuenta de lo agradecido que estás por este segundo amor que realmente funciona. Ahora estás preparado para amar a alguien de una manera en que no lo estabas antes.
Disfrútalo.
Source: UPSOCL