El día de ayer las Olimpiadas de Río llegaron a su fin y lo que hicieron después de la clausura los atletas,  un secreto que pensaron se lo llevarían hasta la tumba fue revelado y la verdad no los juzgamos al contrario que bueno que liberaron el estrés así.

Después de haber participado en los Juegos los atletas celebraron la victoria (o la derrota da igual) con un festín sexual en la Villa Olímpica a tal grado que ocasionó “graves” problemas en la ciudad.

Después de la clausura y como el ambiente se estaba poniendo muy caliente por culpa de los bailarines y bailarinas de samba, se repartieron 450 mil condones para los 10 mil 500 competidores y vaya que le dieron vuelo a la hilacha pues parece que todos los usaron y también a todos se les ocurrió deshecharlos en el inodoro sin pensar en las consecuencias.

El día de hoy, durante las primeras horas del día los medios locales alertaron que se había producido un problema con el desagüe, debido a la gran cantidad de preservativos.

En fin, estos brasileños no aprenden. Lo mismo les pasó con los Juegos Panamericanos pero que se le va hacer llevan el sabor por dentro.

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