Ivanka Trump y Jared Kushner podrían dejar La Casa Blanca de Trump
Un poco antes de clumplir seis meses como residentes de Washington D.C., Ivanka Trump y su esposo, Jared Kushner, se encuentran contemplando si deberían regresar a Nueva York, reportó el diario New York Times. El yerno y asesor del Presidente número 45 “ha estado charlado con algunos amigos” de la Gran Manzana y, según las fuentes del periódico, Jared habló “seriamente” sobre la posibilidad de dejar la política. De avanzar esa decisión, Kushner, Ivanka, y sus tres hijos regresarán a su vida habitual en Manhattan.
Según el portal Heat Street, Jared e Ivanka se habían dado seis meses para triunfar como políticos en Washington. Desafortunadamente Kushner, de 36 años de edad, se ha visto envuelto en una investigación del FBI, la cual sigue indagando sobre la intromisión del gobierno ruso en las elecciones presidenciales. Ivanka, también de 36, ha intentado implementar un permiso para garantizar la licencia maternal a todos los trabajadores estadounidenses, entre otros beneficios, pero no ha tenido mucho éxito.
En caso de regresar a Nueva York, Jared seguramente continuaría trabajando en bienes raíces, el negocio familiar, mientras que Ivanka retomaría su antiguo puesto en la empresa que lleva su nombre. “Pensé que sería más fácil”, enfatizó Donald Trump al diario Reuters a finales de abril después de sus primeros 100 días como presidente. “Comparado con los labores de mi vida anterior, esto es mucho más trabajo”.
El padre de Ivanka fue el primero en admitir que la vida de un político en Washington ha sido bastante difícil. “Yo amaba lo que solía ser mi vida”, confesó el esposo de Melania Trump, “tenía muchas cosas andando”. Donald, acostumbrado a viajar a cualquier hora y a cumplirse cualquier capricho, lamentó su falta de privacidad: “Es como estar en tu propio capullo porque tienes una protección masiva. No puedes ir a ningún lado”.
El famoso Servicio Secreto custodia y observa al presidente y su familia 24 horas al día, detalle que también ha molestado a los vecinos de Kushner. Ubicada en la exclusiva zona de Kalorama, que es habitada por las familias más influyentes de Washington D.C., la casa de Ivanka y su esposo fue visitada por un grupo de protestantes a principios de abril.
Nadie disfrutó más de aquella manifestación que Dianne Bruce, una vecina, a quien se le retrató muy sonriente mientras observaba la trifulca con una copa de vino en su mano. Dicha vecina, quien también salió luciendo un lujoso abrigo de piel, rápidamente se convirtió en un éxito en las redes sociales, generando decenas de ‘memes’ y ‘tweets’ humorísticos.