La Auditoría Superior de la Federación (ASF), anunció una serie de medidas como muestra de un ejercicio eficiente y austero del gasto, en el actual contexto. Indica que la institución hará un esfuerzo por racionalizar el uso de los recursos financieros asignados en su presupuesto. Y "con base en las proyecciones que hemos llevado a cabo en los últimos días, se podrán alcanzar economías de alrededor de 50 millones de pesos, cifra que será reintegrada a la Tesorería de la Federación con cortes mensuales y reportada a la opinión pública con esa misma periodicidad, con el fin de que se conviertan en recursos disponibles para ser utilizados en otros conceptos". Además señala que la ASF cuenta con diversos inmuebles para su operación. Y que al ocupar su nueva sede procederá a su enajenación, con lo cual prevé obtener por la venta de uno de ellos al menos 70 millones de pesos y otro de los cuales podría ser aportado para el funcionamiento del Sistema Nacional Anticorrupción. Asimismo indica que los recursos obtenidos por dicha venta serían integrados a la Tesorería de la Federación para su disponibilidad. De manera paralela, la ASF continuará implementando medidas de racionalización del gasto y adoptará acciones suplementarias, tales como: No subir los sueldos del personal de mandos medios y superiores; medida vigente desde hace siete años. No habrá vehículo asignado ni vales de gasolina para los Directores Generales de la institución. Cancelará la renta de inmuebles debido a la ocupación de la nueva sede de la institución. Hará una disminución del 50 por ciento en gastos de difusión. Y la reducción del 100 por ciento en estudios e investigaciones contratados con externos. Así como la cancelación de comisiones internacionales, exceptuando aquellas en las que la ASF presida el comité técnico, grupo de trabajo o asamblea correspondiente. Y la eliminación al 100 por ciento la renta de salones y auditorios para la realización de eventos. Aun con estos ajustes; destaca la ASF que enfrenta una circunstancia histórica derivada de la reestructuración institucional que debe adoptarse como consecuencia de la aprobación del Sistema Nacional Anticorrupción (SNA). Con lo cual debe abordar una nueva realidad en la que se presenta un universo auditable ampliado y tareas inéditas que implican la utilización adicional de capital humano y recursos materiales y financieros, en relación con el mandato anterior. Por lo que aumentará en nueve por ciento el número de auditorías para la Cuenta Pública 2016, con el fin de cumplir con las nuevas tareas encomendadas. Adicionalmente, deberá crear, de conformidad con la nueva Ley de Fiscalización y Rendición de Cuentas de la Federación y la Ley General de Responsabilidades Administrativas, dos áreas dedicadas a la investigación y substanciación de faltas administrativas. La ASF comunica que se compromete a llevar a cabo revisiones sobre la implementación de las medidas de austeridad anunciadas por diversas entidades públicas. Recordó que recordar que la ASF ha logrado recuperaciones, derivadas de sus auditorías, por más de 108 mil millones de pesos que representan 47 veces su presupuesto actual. sos