Técnico del vuelo de Chapecoense narra su experiencia en el accidente. Con Ciro Gómez Leyva

Erwin Tumirí, técnico del vuelo en el que viajaba el equipo de futbol brasileño Chapecoense, narró cómo ocurrió el accidente en el que perdieron la vida 71 personas a 13 kilómetros del aeropuerto de Antioquia, Colombia En entrevista concedida para BLU Radio, Tumirí comentó que los pilotos no informaron sobre lo que estaba ocurriendo. "En ese momento todos sabíamos que íbamos a aterrizar normal, porque ya habían anunciado que nos sentáramos, que nos abrocháramos los cinturones porque ya íbamos a aterrizar", lo que le hizo pensar que sería un aterrizaje normal. El técnico de vuelo agregó que nunca les dieron la declaración de emergencia. "Al momento del aterrizaje vibró el avión, se apagaron las luces y se prendieron las luces de emergencia. Ya ahí empezó una mala vibra de nosotros". Tumirí precisó que como él sirve a una empresa de mantenimiento, iba sentado en la galera (última fila de asientos). Detalló que su trabajo es hacer un chequeo general de la aeronave. Ya durante el vuelo, los técnicos son requeridos cuando hay alguna falla, "pero en esta ocasión no hubo eso. A mí no me llamaron". El técnico de vuelo desmintió que se haya alcanzado a poner en posición fetal, lo que le salvó la vida. Otra de las interrogantes tiene que ver con el por qué el piloto no cargó combustible en Bogotá o en Cobija, Bolivia, incluso preguntó al Capitán Ángel Lugo, quien perdió la vida, y "él me dijo: sí vamos a parar en Cobija", pero no reabastecieron combustible. Al partir del Aeropuerto de Viru Viru con "todo a full", sin embargo, se esperaba que hicieran una parada para reabastecerse en Cobija. El técnico, cumpliendo con su deber, Erwin Tumirí informó a la empresa para la que trabaja del despegue. Como técnico de vuelo, Erwin Tumirí está a cargo de abastecer el combustible, "siempre y cuando lo solicite el encargado y el despachador de vuelo, encargado de medir la autonomía". Agregó que el Capitán debió hablar con él sobre la situación que prevalecía en el vuelo. "El piloto (Capitán Quiroga) debería antes comunicarse conmigo, porque yo soy encargado también del mantenimiento de la aeronave. Yo me enteré del combustible por la tripulante que sobrevivió, Jimena", quien supo que había poco combustible. Luego del accidente, Erwin señaló que caminó y encontró a Jimena, la ayudó a levantarse y "corrimos hacia arriba", pues tenían temor de que la aeronave se deslizaría; también "empecé a gritar quién estaba vivo". Tumirí informó que desea terminar su curso de pilotaje. Confesó que aunque sintió miedo en el primer vuelo que tomó tras el accidente, sin embargo, "después, en los segundos aterrizajes, todo ya más tranquilo". El técnico agradeció el apoyo que recibió de la gente de Colombia por el accidente. Asimismo, comentó que ya de regreso en su natal Bolivia, su madre y sus hermanos fueron los primeros en recibirlos. "Mi mamá, como toda madre, llorando". jgam