De acuerdo a la Encuesta Nacional Bicentenario UC-Adimark, un 35% de las 2.016 personas consultadas piensa que el Estado debería preocuparse y hacerse responsable por el bienestar de las personas. El mismo porcentaje obtuvo la opción que plantea que cada persona debería preocuparse y responsabilizarse por su propio bienestar.

Hace 10 años, la situación era distinta, puesto que las respuestas inclinadas en el esfuerzo individual concentraban un 43% de las preferencias, mientras que las relacionadas con la responsabilidad del Estado marcaban un 25%.

La valoración del Estado tiene como correlato una mayor exigencia por parte de los ciudadanos. Así, un 32% piensa que la ayuda del Estado debe destinarse solo a los más pobres y vulnerables, versus el 42% que dijo que todos los ciudadanos deberían recibir la misma ayuda.

En 2012, la situación era inversa, debido a que un 43% de los entrevistados contestó a favor de la focalización, mientras que un 30% lo hizo bajo la lógica del universalismo. La tendencia se revirtió en 2015, cuando un 37% se declaró a favor de focalizar la ayuda del Estado y un 40% manifestó estar a favor de universalizar el apoyo estatal.

La encuesta también evidencia que las personas piensan que para progresar en la vida se requieren garantías del Estado de buena educación y trabajo. Un 38% se inclinó por esta opción, mientras que 31% opinó que la mejor forma de progresar en la vida es esforzarse por emprender, capacitarse y trabajar duro.

El resultado de este año muestra una tendencia a la baja respecto del esfuerzo individual como impulsor del progreso personal. Si en 2014 las respuestas asociadas a esta perspectiva marcaban 40%, en 2015 alcanzaron un 34%, cuatro puntos más que en la medición de este año.

En cuanto al progreso del país, 16% de los encuestados declaró que lo mejor es que haya crecimiento económico alto y sostenido. A su vez, un 56% señaló que lo mejor para el país es que haya igualdad social y una distribución de los ingresos más equitativa.

CONFIANZA POR EL SUELO

Las universidades se ubican como las instituciones más confiables para los chilenos, con un 30% de valoraciones positivas. Le siguen la Iglesia Católica (22%), los medios de comunicación (16%), las Fuerzas Armadas (16%), los sindicatos (12%) y los municipios (10%).

Por otro lado, las cinco menos confiables para los encuestados fueron los tribunales (7%), las empresas (7%), el gobierno (5%), los parlamentarios (2%) y los partidos políticos (1%).

A pesar de estar en el top 5 de las instituciones más confiables, tanto la Iglesia Católica como las Fuerzas Armadas registraron bajas significativas respecto de mediciones anteriores. Así, en 2006 la Iglesia alcanzó un 44% de confianza, en tanto, las FFAA obtuvieron 46% en 2012 y 26% en 2015. Este último dato indica que en un año bajaron 10 puntos.

Si bien siguen siendo poco confiables para los chilenos, las empresas registraban más confianza hace dos años, puesto que en 2014 totalizaron un 15% de respuestas favorables. Al año siguiente marcaron un poco más de la mitad (8%).

¿SE ACABA EL SUEÑO DEL JAGUAR?

Si hace una década un 59% de los encuestados creía que Chile alcanzaría el desarrollo en un plazo de 10 años, hoy esa expectativa ha descendido a un 47%. La desigualdad de ingresos tampoco parece tener solución en el mediano plazo, porque un 28% piensa que se reducirá en una década, cifra cuatro puntos mayor que en 2015, pero lejana del 41% registrado en 2006.

En 2006 un 68% creía posible resolver el problema de la calidad de la educación en 10 años, en tanto, en esta medición, un 47% contestó en esa línea, aunque siete puntos más que el año pasado.

Una década atrás, el 43% de los consultados decía que Chile eliminaría la pobreza en 10 años, hoy esa opción obtuvo un 32% de respuestas favorables, tres puntos más que en 2015.

Menos de la mitad de los encuestados cree que un joven inteligente pero sin recursos tiene la posibilidad de ingresar a la universidad (47%), seis puntos menos que hace dos años.

Con un 39%, se mantiene la opción respecto de que cualquier persona puede iniciar su propio negocio y establecerse independientemente. En 2009 esta opinión concentraba el 49% de las respuestas.

El pesimismo se amplía respecto de las posibilidades de que un trabajador adquiera su propia vivienda. Un 34% lo cree posible, sin embargo, en 2009 un 55% afirmaba esta opción y el año pasado lo hizo un 40%.

Salir de la pobreza tampoco parece tarea fácil, según la perspectiva de los consultados. Un 21% lo cree posible, evidenciando cierta estabilidad, puesto que en 2013 marcó un 24%. Sin embargo, en 2009 se obtuvo un 27%.

RECONOCIENDO CONFLICTOS

Los encuestados reconocen diversos focos de conflicto al interior del país. Por ejemplo, un 84% señala que existe un “gran conflicto” entre el Estado chileno y el pueblo mapuche.

También se percibe un conflicto entre gobierno y oposición (64%), aunque menor en relación a registros anteriores. Por ejemplo, en 2012, un 78% sostuvo que entre ambas partes existía un “gran conflicto”.

Entre trabajadores y empresarios, un 62% cree que existe un conflicto significativo, mientras que un 55% piensa que existe entre ricos y pobres.

En dos años, la percepción sobre los conflictos entre Chile y los países vecinos aumentaron ocho puntos. En 2014, la pregunta obtuvo un 40%, sin embargo, para este año arrojó un 48%.

Santiago también está en tela de juicio, puesto que un 47% expresó que existe un “gran conflicto” entre la capital y las otras regiones. El registro es el más alto en una década porque en 2006 obtuvo un 30% y en 2014, un 39%.

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Post y Contenido Original de : El Ciudadano
http://www.elciudadano.cl/2016/11/14/338500/aumenta-valoracion-del-estado-como-responsable-por-el-bienestar-de-las-personas/
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