El lunes pasado, la Fiscalía General de Justicia del Estado de México reveló que en un establecimiento asegurado la semana pasada en Toluca se encontraba pollo contaminado debido a prácticas de acaparamiento, no era seguro para el consumo humano. Se encontraron sustancias tóxicas que indicaba que estaba el pollo contaminado, las cuales podrían causar cáncer.
El producto contaminado con sustancias altamente cancerígenas se habría distribuido al menos en pollerías de los municipios de Toluca y Zinacantepec. La célula delictiva de la Familia Michoacana, que operaba en esta área con el objetivo de acaparar el mercado de pollo y huevo, fue identificada por la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM).
Fuentes al interior de la institución indicaron que, después de catear y asegurar las dos bodegas ubicadas en la colonias San José Guadalupe Hichochitlán y Parques Nacionales, en Toluca, realizaron pruebas periciales a aproximadamente 160 pollos que se encontraban en el operativo.
Tras la práctica de pruebas periciales al pollo contaminado localizado, la FGJ detectó la presencia de:
- Poliacrilamida
- Carboxilo modificado
- Alto contenido de carboxilo
- Tartrato de sodio y potasio
De acuerdo con la FGJEM, las sustancias que llegan incrementan el riesgo de desarrollar cáncer, por lo que se establece que los alimentos asegurados no son aptos para el consumo humano.
¿Dónde están las bodegas aseguradas?
Los medios locales resaltaron que una de las bodegas de pollo se encuentra en la calle Tultepec, en la colonia San José Guadalupe Huichochitlán. La segunda se ubica en la avenida Torres Chicas, en la colonia Parques Nacionales.
La Fiscalía mexiquense indicó que, como resultado del aseguramiento, ha involucrado a las autoridades sanitarias del Estado de México y está llevando a cabo las investigaciones pertinentes con la colaboración de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), la Guardia Nacional (GN) y la Secretaría de Seguridad estatal.