Miles de personas participaron en una marcha en protesta contra los bombardeos de Israel en la Franja de Gaza, instando al gobierno de Andrés Manuel López Obrador a cortar relaciones diplomáticas, políticas y económicas con la administración de Benjamín Netanyahu. Este último se ha negado a extraditar a Tomás Zerón, acusado de tortura y alteración de pruebas en el caso Ayotzinapa. Además, la marcha solicitó al político tabasqueño que condene el genocidio del pueblo palestino perpetrado por el Estado de Israel.
La marcha partió del Ángel de la Independencia y culminó en el monumento a la Revolución, con consignas como “No es una guerra, es genocidio”, “Dónde están, no se ven, las sanciones a Israel” y “A romper, a romper, relaciones con Israel”. Diversos colectivos, incluyendo la Coordinadora de Solidaridad con Palestina, el Frente del Pueblo en Defensa de la Tierra Atenco y el Sindicato Independiente de Trabajadores de la Universidad Autónoma Metropolitana (SITUAM), convocaron a esta manifestación.
Los participantes en la marcha fueron acompañados por el ritmo de una batucada y llevaron pancartas que destacaban la demanda principal de poner fin a la masacre en la Franja de Gaza. En un comunicado leído en el monumento a la Revolución, exigieron una postura contundente por parte de la Secretaría de Relaciones Exteriores y de todo el gobierno mexicano en contra del imperialismo sionista, norteamericano y europeo, siguiendo el ejemplo del presidente Gustavo Petro en Colombia, en solidaridad con el pueblo palestino.
Urgieron a enviar de manera inmediata ayuda humanitaria desde México hacia Gaza. “Hacemos un llamado a favor de la libre autodeterminación para el pueblo palestino y a su legítima defensa. Creemos en la posibilidad de construir un Estado pacífico para árabes y judíos”, subrayaron los manifestantes, entre los cuales se encontraban miembros del partido gobernante Morena.