Según los supervivientes del festival israelí atacado por Hamás, ellos fueron víctimas de una masacre. La música del festival Tribe of Nova tuvo que detenerse debido a las alarmas antiaéreas y los cohetes lanzados desde Gaza.
El festival Tribe of Nova se vio interrumpido por las alarmas antiaéreas y el ruido de los cohetes provenientes de Gaza.
Durante la madrugada del 7 de octubre, un grupo de milicianos de Hamás provenientes de la Franja de Gaza atacaron un festival en el desierto donde aproximadamente 3 mil jóvenes israelíes estaban bailando al ritmo de música electrónica. Estos milicianos, fuertemente armados, causaron la muerte de 260 personas y secuestraron a varios más, convirtiéndose en el momento más violento de esta nueva guerra.
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Alrededor de las 6:30 de la mañana, cuando amanecía, las alarmas antiaéreas y el estruendo de los cohetes provenientes de Gaza interrumpieron la música del festival Tribe of Nova y obligaron a los asistentes a correr.
Después de que los equipos de emergencia de Israel pudieron ingresar al área, descubrieron 260 cadáveres y evidencia de una masacre sin precedentes.
El suceso ocurrió en las cercanías del kibbutz Reim, que se encuentra a menos de diez kilómetros de la valla de separación. En ese lugar, cientos de miembros del grupo islamista Hamás cruzaron la valla, generando un conflicto que ha causado más de 900 muertos y 2,600 heridos en Israel, así como al menos 560 fallecidos y 2,900 heridos en Gaza debido a los ataques de represalia por parte de Israel.
En una fiesta con mis amigos, escuchamos las sirenas alrededor de las 6:30 de la tarde debido a los misiles que venían de Gaza. Tratamos de alejarnos de la zona de la fiesta, pero nos dimos cuenta de que había muchos terroristas que querían atacarnos y matarnos", cuenta Gal Raz, un israelí de 31 años, desde su casa en las afueras de Tel Aviv.
Tratamos de huir, pero nos encontramos con una carretera bloqueada por vehículos cuyos ocupantes habían sido asesinados por los terroristas. Vimos numerosos cadáveres", dice el chico, quien desde entonces apenas sale de su casa y, al recibir la convocatoria del Ejército para unirse a la reserva, explicó que no se sentía capaz de servir.
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Raz, que se separó de su amigo cuando comenzaron los cohetes y los disparos, decidió huir hacia el sur con un grupo de israelíes. Sin embargo, a pocos metros de distancia, fueron emboscados por milicianos palestinos que comenzaron a disparar contra el vehículo en el que viajaban.
Relata que lograron escapar, sin embargo, el automóvil se detuvo y tuvieron que continuar a pie. En ese momento, decidieron correr hacia la comunidad más cercana, que se encontraba a seis kilómetros de distancia. Sin embargo, sus familiares les advirtieron que Hamás había tomado el control de varias localidades cercanas y les sugirieron ocultarse entre la vegetación.
Permaneció allí, tumbado junto a cuatro personas y con la cabeza cerca del suelo, mientras veía a milicianos pasar a pocos metros de distancia durante las ocho horas que pasaron hasta que llegó el Ejército. En ese momento, pudo ver en su teléfono móvil un vídeo en el que se mostraba a su amigo, Avinatán Or, siendo secuestrado y llevado a Gaza junto con su novia, Noa Argamani. Estas imágenes se volvieron rápidamente virales en las redes sociales.
Desde aquel momento, existen simultáneamente sentimientos de tristeza, desesperación y furia. Aunque expresa su frustración por la respuesta lenta de las fuerzas de seguridad israelíes, su ira se dirige hacia las milicias palestinas: "Después de lo ocurrido el sábado, es necesario que Hamás y la Yihad Islámica Palestina dejen de existir".
Raz, quien se ha unido a una campaña para exigir la liberación de más de 100 personas capturadas por Hamás, declara que no solo se llevaron a Avinatán y Noa, sino también a madres, mujeres embarazadas, niños y personas mayores. Su único objetivo fue causar pánico y desastre entre nuestra gente.
Daizy Moshe se encuentra entre los numerosos israelíes que están desesperadamente buscando a sus seres queridos desde el sábado, sin recibir ninguna respuesta. Su hermano menor, Oz Moshe, desapareció después de intentar escapar del festival.
En la madrugada, un chico de 24 años habló con su hermana a través de una videollamada mientras escapaba de un ataque después de haber sido herido con tres disparos: uno en la pierna, otro en el pecho y otro en la espalda.
Daizy relató en una conversación con Efe que estuvieron en comunicación durante aproximadamente 15 minutos, mientras se escuchaban disparos y explosiones de fondo. Neomí, su novia, hablaba con los servicios de emergencia para recibir instrucciones sobre cómo ayudar.
Él me informó que la chica que estaba conduciendo había sido disparada, lo cual provocó que escuchara gritos desesperados seguidos de múltiples disparos. Después de eso, todo quedó en silencio. Estuve en la llamada durante 10 minutos, sin decir nada, mientras mi voz se quebraba. Acabo de regresar del funeral de Neomí, cuyo cuerpo fue identificado ayer mediante una prueba de ADN.
Después de no obtener noticias sobre su hermano, Daizy decidió ir con el resto de su familia al festival en un intento de localizarlo.
"No hemos podido encontrar el automóvil, el cuerpo ni nada relacionado. Presenciamos una gran cantidad de vehículos destrozados y cuerpos esparcidos por todas partes. Tampoco hemos podido encontrar a sus amigos, creemos que podrían estar muertos o secuestrados, pero la única información que recibimos es la que vemos en la televisión", agrega.
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