No importa la edad para tener una mascota a tu lado. Si un adulto mayor se siente preparado para dedicarle el tiempo y cariño suficiente a un perro, puede adoptar a un animal de compañía que se adapte a su estilo de vida, ya que no todas las razas requieren de actividad física intensa y sólo necesitan los cuidados básicos.
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Tomar la decisión de adoptar un perro durante los años dorados aporta muchos beneficios tanto a la salud emocional como al bienestar físico. Por eso, te damos 10 razones por las que tener una mascota en casa mejora la vida de los abuelitos, de acuerdo con expertos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
¿Por qué una persona de la tercera edad necesita un perro?
- Brinda apoyo emocional: Ya sea que el adulto mayor se sienta triste o desanimado, un perro ayuda a sobrellevar estos malestares emocionales o trastornos más severos como la depresión.
- Sensación de acompañamiento: Es común que un anciano pase tiempos prolongados en soledad, así que una mascota generará una sensación de compañía y evitará sentimientos de tristeza.
- Creación de un vínculo: Al convivir diariamente con un canino, se forma un vínculo afectivo que ayuda a estimular emociones y sentimientos positivos.
- Elimina el estrés: El contacto físico (acariciar a un peludito) estimula la producción de endorfinas que actúan como potentes analgésicos y dan como resultado una sensación de placer que contribuye a eliminar o reducir el estrés.
- Evita el sedentarismo: Tener un perro implica asumir los cuidados básicos, uno de ellos es la actividad física. El abuelito puede salir a dar un paseo corto con la mascota, o bien, jugar en el interior de la casa.
- Incentiva la salud: Salir a pasear o caminar con la mascota beneficia en las articulaciones y salud del adulto mayor, así impulsa el ejercicio y la movilización.
- Sensación de ocupación: Un anciano que ya no tiene una ocupación laboral, podrá tener el tiempo suficiente para dedicarse a su amigo de cuatro patas. A la vez, es una forma de elevar su autoestima haciéndolos sentir útiles.
- Protección animal: Los perros son seres naturalmente leales y protectores con sus dueños, así que tener cerca a uno puede ser de utilidad por si necesitan ayuda en un caso extraordinario.
- Estimulan la felicidad: La interacción con una mascota también contribuye a la liberación de oxitocina y serotonina, hormonas del amor y la felicidad, respectivamente.
- Alertan del peligro: Es decir, un perro tiene un excelente sentido del oído y es capaz de avisar al dueño en caso del sonido de una alarma de incendios o de temblores, o bien, si suena el teléfono.
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Estas son sólo algunas de las razones que un perrito puede aportar en casa de los abuelos. El investigador de la Facultad de Psicología de la UNAM, Hugo Sánchez Castillo, recomienda que el adulto mayor cuide a un perro de raza pequeña que se adapte a un ritmo de actividad moderado, y confirma que la presencia de una mascota en el hogar trae consigo varios beneficios.
“Hay investigaciones hechas en personas en edad avanzada que demuestran que la posesión de una mascota les permite incorporar mejores esquemas de movimiento y tener una sensación de ocupación y bienestar general”
Por último, el especialista indica que un gato también es una mascota ideal para una persona en la vejez, ya que al tener una esperanza de vida mayor que la de un perro, sus posibilidades de hacer compañía durante más tiempo aumentan. En general, un can vive entre 10 a 17 años (dependiendo su raza), mientras que un felino puede alcanzar los 20 años o más.
