Cuidar a un conejo significa ser tan responsable como con cualquier otra mascota. Puede ser difícil saber cómo se sienten debido a que son especies de presa, y por eso son muy buenos ocultando enfermedades. Conocer a tu colita de algodón será lo más importante para detectar síntomas o comportamientos extraños y poder darle la atención médica cuando lo necesite. Para hacerlo más sencillo, te compartimos los signos más comunes que presentan los conejos cuando están enfermos, siguiendo las advertencias de PETA. 

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1. Patitas inflamadas

Si las patas del peludito están rojas, inflamadas o le han aparecido ampollas y otras heridas, el culpable es el suelo. Quiere decir que el conejo pasa mucho tiempo caminando o saltando por una superficie que lo está lastimando. También se puede deber al material del que están hechas las jaulas, si no son lo suficientemente fuertes para soportar el peso del animalito. 

El suelo hecho de madera, losa y azulejo tampoco es ideal. Para evitarlo, lo mejor es proveer a tu mascota de una superficie suave y flexible para que ande o simplemente darle acceso a tierra y pasto (que es lo más óptimo).

Otras causas de las ampollas y de las patitas lastimadas son enfermedades como la obesidad y la artritis; pero solo un especialista puede determinar la causa definitiva. 

2. Estasis

Muchas personas que han tenido un conejo como mascota por un largo periodo de tiempo se han enfrentado a la estasis gastrointestinal, pues una de las enfermedades más comunes que afectan a estos animales. Este problema consiste en que los fluidos (sangre, contenidos intestinales) dejan de fluir adecuadamente, y los conejos que lo padecen sufren de cansancio y no pueden ponerse cómodos debido a los gases o calambres. 

Afortunadamente es un problema fácil de tratar. Pero tiene que hacerse a tiempo, o puede resultar fatal. Requiere de atención veterinaria. Y si sabes que tu conejo es propenso a padecer de estasis, puedes consultar con el especialista para tener un kit de emergencia en casa. 

3. Dificultades para respirar

Si tu conejo estornuda mucho, tiene secreción nasal y los ojos llorosos (como si se tratara de un resfriado), es posible que esté sufriendo de alguna infección en las vías respiratorias y debe ser examinado de inmediato. Las dificultades para respirar pueden resultar fatales. 

4. Cabeza recargada hacia un lado

Puede tratarse de tortícolis y sucede como consecuencia de diferentes factores: un derrame cerebral, una infección por protozoos, una infección de oído, cáncer, intoxicación o trauma (un golpe fuerte). Con el tratamiento adecuado, muchos conejos pueden llevar una vida plena. Si tu mascota muestra signos de inclinación en su cabeza, consulta a tu veterinario tan pronto como sea posible. 

5. Presencia y picaduras de moscas

Las moscas alrededor de cualquier animal nunca deben ser ignoradas. La miasis es una enfermedad parasitaria ocasionada por las moscas, que pican a los conejos hasta que sangran y luego ponen huevos en sus heridas; produciendo gusanos que devoran sus tejidos. Es una condición tan enloquecedora y dolorosa como suena. 

Para evitar el ataque de las moscas, los conejos deben mantenerse en el interior o en un área que se limpie muy frecuentemente. También es importante que cualquier área en la que el conejo haga sus necesidades se limpie y seque, o se convierte en el hábitat perfecto para las moscas. Estas precauciones son especialmente importantes durante la época de verano, por las temperaturas calurosas. 

6. Bolas de pelo (regurgitadas)

Los gatos no son los únicos que producen bolas de pelo. Los conejos también las pueden acumular en sus estómagos, y esto puede provocar estasis gastrointestinal (que fue mencionada anteriormente). Para evitarlas que esto suceda, es necesario que el animalito consuma toda la fibra que necesita y cepillarlos frecuentemente (debido a que el pelo entra en sus cuerpos cuando se acicalan ellos mismos). 

7. Cansancio

Los orejas largas son animales muy sociables, que disfrutan de la interacción humana. También necesitan hacer ejercicio y jugar para mantenerse sanos. Entonces, que un conejo luzca cansado o que esté durmiendo más de lo normal no es una buena señal en muchos casos. Y si no se les otorga suficiente atención, juego y diversión, se pueden aburrir y aislar, volviéndolos vulnerables a la depresión y al letargo.  

8. Dientes demasiado largos

Que sus dientes crezcan demasiado puede ser la causa de una gran cantidad de problemas de salud.Y no puedes simplemente cortarlos con un cortaúñas para humanos o unas pinzas. Es por esto que la mejor manera de ayudarlos a mantener sus dientes en una longitud cómoda y segura es alimentarlos con un dieta rica en heno de buena calidad. Como sus dientes nunca dejan de crecer, siempre deben de tener algo que masticar a la mano, para rebajarlos. 

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9. Falta de apetito

Si tu mascota se niega a comer y está perdiendo peso, es posible que sufra de anorexia (pérdida de apetito) o pseudoanorexia (incapacidad de masticar o tragar alimentos). Este síntoma se verá acompañado por menos heces y ganas de ir al baño. La anorexia y la pseudoanorexia surgen como consecuencia de una enfermedad bucal, estomacal, deficiencia renal, úlceras en el estómago, tumores, intoxicaciones, virus, entre otros males; por lo que será necesario contactar a su veterinario cuando antes.