Isaac Ramírez – enero 08, 2020
Sin contar con las condiciones mínimas para su diagnóstico y atención, así como para ausentarse de sus actividades durante su tratamiento médico, tal y como sucedió con Jorge Alejandro López Rivas, quien falleció el pasado 04 de enero, al menos 40 médicos internos de pregrado (MIP) del Hospital General de Ecatepec «Dr. José María Rodríguez» han dado positivo al COVID-19.
Por lo anterior, los MIP fueron retirados del Hospital General de Ecatepec, por las autoridades educativas de la FES Iztacala de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), de la Universidad Autónoma Metropolitana, del Instituto Politécnico Nacional (IPN) y de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM), por no existir condiciones para que desempeñen sus funciones de manera segura y con el equipo necesario, por lo que no existe fecha para que los más de 50 estudiantes regresen a laborar a este nosocomio.
Médicos Internos de Pregrado y Residentes del Hospital General de Ecatepec, perteneciente al Instituto de Salud del Estado de México (ISEM), acusaron que, a pesar de que se encuentran en la primera línea de batalla, no han recibido equipo de protección personal, ni los insumos básicos para protegeese del virus, ni tampoco han sido considerados para la vacunación anticovid, como sí ha ocurrido con el personal administrativo o que no atiende a personas contagiadas con el virus SARS-Cov2.
Indicaron que, aun cuando la norma oficial mexicana de la Secretaría de Salud federal establece que los médicos internos de pregrado no pueden estar en áreas de alto contagio contra el COVID-19, en este nosocomio mexiquense sí han sido asignados a áreas domde se atienden a pacientes con síntomas relacionados con la enfermedad, como es el caso de la Sala de Urgencias, Terapia Intensiva y Triage Respiratorio, mismas que son consideradas de alto riesgo de contagio, y en las que no se les ha otorgado equipo de protección personal.
Detallaron que, del total de casos, cinco de se encuentran positivos y con sintomatología presente, cuatro más tienen síntomas sin una prueba PCR confirmada y 31 más han sido dados de alta, quienes, en su mayoría, han sido obligados a asistir aún enfermos, bajo amenazas de que se les puede dar de baja por inasistencias y/o incumplimiento de sus funciones, pese a que han mostrado incapacidad que, en algunos casos, no les han sido reconocidas.
Relataron que algunos de sus compañeros se les ha negado la aplicación la prueba PCR o se les ha canalizado al Hospital General de Las Américas, pese a ello, se han rechazado los resultados de pruebas rápidas, por lo que han recurridos a servicios particulares para su atención, a pesar de que aparentemente estaría obligada la institución a brindarles la atención medica.
Por su parte, la familia de Jorge Alejandro López explicó que, hasta ahora, la Secretaría de Salud del Estado de México o el gobierno mexiquense no han establecido contacto con ellos, pese a la negligencia que ocasionó que el médico interno de pregado perdiera la visa
Sharon López Rivas, hermana de Jorge Alejandro, sostuvo que, hasta ahora, solo la Facultad de Estudios Superiores (FES) Iztacala se ha acercado con la familia, quien les dio a conocer que el estudiante contaba con un seguro de vida que podrán cobrar, por lo que les ayudarían en los trámites.
Además, desechó las versiones que se han propagado sobre el contagio de Jorge, acerca de que éste habría ocurrido al exterior del nosocomio, pues afirmó que su hermano solo iba del hospital a su casa y se mantuvo resguardado en sus tiempos libres, aun cuando trabajaba con su papá para financiar sus estudios y guardias, en donde no habría tenido contacto con ninguna persona; hecho que fue respaldado por sus compañeros quienes lo describieron como un hombre que se cuidadaba para proteger a sus papás, aunque su mentor, su novia y su cuñada se enfermaron durante su atención.
Los familiares descartaron informar si actuarán legalmente, por lo que se limitaron a decir que seguirán revisando el caso oara definir cómo procederán en contra del nosocomio.