27 C
Mexico
viernes, septiembre 20, 2024

Buy now

Revolución

Estamos un 20 de noviembre en 1974. Revueltos, carros alegóricos con deportistas en calurosa mañana, convocan a un buen número de ciudadanos que a los lados de las calles del desfile, se dan cita dándose un respiro a la cotidianidad.

Los charros y la escaramuza femenina abren el desfile, charros que no trabajan la tierra, chicas poblanas de la High Society. Las manos que manejan bisturís, boutiques, manojos de $, ahora llevan la brida de finos equinos.

Una familia clase media, saborea sus raspados de tamarindo, Jamaica y limón.

– Papi… ¿esos charros pelearon en la revolución? La maestra nos enseñó en el libro.

– Este… si. Y el ciudadano leído y escrebido piensa en las gigantescas haciendas porfiristas con el peonaje daba un aire a la esclavitud.

El sol pega. La voz del narrador del desfile se oye clara, metálica:

– ¡La revolución se hizo para quitar desigualdades, privilegios para que el pueblo tuviera!…

En el balcón central el gobernante sonriendo, agradece el saludo del ciudadano del carro alegórico que representaba a Emiliano Zapata, con la mano en alto lo aprueba.

– ¿Papi quien fue Pancho Villa?

Y el buen padre de familia nomás calla, pensando que porque diablos no hay una película sobre los hermanos Flores Magón y dándole el ultimo chupete a su dulzón raspado casi suelta una leperada al escuchar al maestro de ceremonias.

– ¡Esta revolución que nos dio justicia, reparto equitativo…!

Y su mente trabaja: ¿Y cuántos muertos para qué? ¡Para que!

Felicidades!

Related Articles

Stay Connected

0FansLike
0FollowersFollow
0SubscribersSubscribe
- Advertisement -spot_img

Latest Articles