El tinte para el cabello es uno de los productos de belleza más populares entre las mujeres, hay quienes lo usan para hacer un cambio al color de sus melenas o cubrir las canas, sin embargo, esto puede causar un grave riesgo de cáncer.
De acuerdo con el National Cancer Institute (NCI), se estima que más de un tercio de las mujeres mayores de 18 años y alrededor del 10% de los hombres mayores de 40 años usan algún tipo de tinte para el cabello.
Los tintes pueden ser permanentes, semipermanentes y temporales, siendo los primeros los más solicitados entre las mujeres, pues son el 80% de todos los tintes que se comercializan actualmente.
Aquellos permanentes consisten en dos productos: “intermedios” (sustancias químicas llamadas aminas aromáticas) y “acopladores” que, combinados con peróxido de hidrógeno, reaccionan y forman las moléculas de color que pintan el cabello.
Generalmente, los colores más obscuros son los que tienen mayores cantidades de “intermedios”.
Pero lo preocupante es que estos productos de belleza contienen más de 5,000 sustancias químicas diferentes, entre ellas, las aminas aromáticas, se ha comprobado que algunas de esas sustancias son causantes de tumores cancerígenos en animales.
Por eso los tintes para el cabello han llamado la atención de numerosos científicos que han llevado a cabo múltiples estudios para determinar si este producto es un factor de riesgo de cáncer en las personas.
Linfoma
Una investigación, basada en la información de cuatro pequeños estudios, reveló que las mujeres que habían usado tintes para el cabello durante un largo lapso de tiempo tenían un riesgo 30% mayor de padecer linfoma no hodgkiniano.
El estudio publicado por el American Journal of Epidemiology encontró que los usuarios de tinte para el cabello tenían un mayor riesgo de padecer linfoma folicular y linfoma linfocítico pequeño, lo cual podría deberse a la larga exposición a los químicos.
Leucemia
Otro estudio, de la Universidad de Illinoise, realizado a 769 pacientes con leucemia aguda y 623 personas sanas, encontró que los riesgos de padecer esta enfermedad eran mayores en quienes habían usado tintes, permanentes y no permanentes, durante más de 15 años.
Sin embargo, otra investigación, del Centro de Estudios y Prevención de Cáncer en Italia, no encontró suficientes evidencias para asociar el uso de tintes de cabello con el riesgo de leucemia, no obstante, este estudio no recopiló datos sobre la frecuencia y el tiempo que los participantes usaron el tinte.
Cáncer de vejiga
Un estudio de la Escuela de Medicina de la Universidad del Sur de California mostró que las mujeres que usaban los tintes una vez al mes tenían 2.1 veces más probabilidades de tener este tipo de cáncer y aumentaba a 3.3 en quienes lo habían usado por años.
Según esa investigación, los tintes de cabello permanentes son los más peligrosos y las personas con mayor exposición a esos químicos, como los estilistas profesionales, tenían cinco veces más probabilidades de contraer la enfermedad.
Precauciones que debes tomar
La Food and Drug Administration (FDA) recomienda a los usuarios de tintes para el cabello seguir las siguientes medidas de seguridad:
Sigue las instrucciones en el paquete. Presta atención a todas las declaraciones de “Precaución” y “Advertencia”.
Haz la prueba de parche, consiste en frotar un poco del tinte en la parte interior de tu codo o detrás de tu oreja y dejarlo por dos días para probar que no tengas una reacción alérgica.
Si tienes una erupción, no uses el tinte en tu cabello.
Debes hacer la prueba del parche cada vez que tiñas tu cabello. En los salones también deben hacerte la prueba.
Nunca tiñas las cejas o las pestañas, pues puede lastimar tus ojos e incluso podría causar ceguera.
Mantén los tintes para el cabello fuera del alcance de los niños.
No dejes el tinte por más tiempo de lo que indican las instrucciones.
Enjuaga bien el cuero cabelludo con agua después de teñir.
Usa guantes cuando apliques el tinte para el cabello.
Nunca mezcles diferentes productos de tinte, pues puede dañar tu cabello y cuero cabelludo.