En el avión cazahuracanes pueden viajar cuatro personas, un piloto, copiloto, navegador y un oficial de reconocimiento del clima
Mientras la población huye del huracán Willa, pilotos e investigadores, van directo al centro del fenómeno en el avión ‘cazahuracanes’ , la función de la aeronave y sus tripulantes es adentrarse al centro de las tormentas para recolectar datos que sirvan para conocer su fuerza y capacidad de destrucción.
La tarea parece sencilla, sin embargo es muy peligro, pues el avión ‘cazahuracanes’, junto con sus tripulantes, tienen que adentrarse en la tempestad, cruzar la pared de agua del huracán de unos 670 kilómetros de diámetro en el Océano Pacifico, en el Atlántico es más pequeño (casi la mitad) e ingresar al ojo del huracán.
En el avión cazahuracanes pueden viajar cuatro personas, un piloto, copiloto, navegador y un oficial de reconocimiento del clima.
Una expedición al ojo de un huracán puede tomar hasta 12 horas a mar abierto, pero aunque se prevea todo el vuelo, debido a que es un fenómeno natural, esto podría variar.
La nave se dirige al centro del huracán y con la nariz registra la lluvia y la velocidad del tiempo, para luego lanzar la sonda de medición en el ojo del huracán la cual reconoce la temperatura, presión, humedad velocidad y vientos.
Ya en el ojo del huracán, las escenas parecen sacadas de una película de desastres naturales, sin embargo el terror es mayor, ya que esto esta pasando “en la vida real” y muestran la fuerza del huracán.
La nave vuelve a girar y recolectar los datos transmitidos la primera vez para que el meteorólogo transmita vía satélite la información.
Estos aviones pertenecen a la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos; son aeronaves tripuladas y equipadas para que científicos puedan estudiar y conocer mejor cómo funcionan los huracanes. Según lo informa el Financiero.
La mayoría de los vuelos suceden en temporada de huracanes, en el Atlántico van de junio a 1 de noviembre.