El 26 de mayo de 2018, en Kiev, todo cambió para el Real Madrid. Ese día el conjunto español hizo historia al conseguir su tercera Champions League de manera consecutiva al vencer en la final al Liverpool por 3 a 1.
Desde esa fecha, contrario a lo que el mundo del fútbol podría imaginar, el clima cambió dentro de la Casa Blanca. El actual mercado de pases parece ser una verdadera pesadilla para los españoles, quienes dejaron de ser uno de los grandes inversores (suelen dar el golpe en cada verano europeo con un fichaje top) para pasar a desmantelarse y perder varias figuras de peso.
Zinedine Zidane, el golpe más inesperado:
“Tomé la decisión de no seguir en el cargo de entrenador del Real Madrid. Es un momento raro, pero este equipo necesita un cambio para seguir ganando, necesita otro discurso. Otra metodología de trabajo y por eso tomé esta decisión”, fue la frase con la que el estratega francés sorprendió a todos.
La marcha del entrenador fue un golpe duro para el plantel y provocó que la dirigencia salga de manera repentina a buscar un nuevo DT. Tras la negativa de Joachim Low y Mauricio Pochettino, Florentino Pérez anunció la llegada de Julen Lopetegui, lo que provocó un terremoto en España a días para el debut del seleccionado europeo en el Mundial de Rusia.
Cristiano Ronaldo aceptó una aventura por Italia:
La relación con Florentino Pérez, día a día, cada vez era más tirante y parecía ser insostenible. El ganador de los últimos dos Balones de Oro consideraba que el club no le pagaba lo que merecía (aparecía por debajo de la línea de Lionel Messi y Neymar) y aceptó el desafío de mudarse a la Serie A.
El entorno del luso utilizó la promesa del presidente de dejarlo irse en caso de que así lo desee para que Juventus no pague la cláusula de rescisión para sacar a CR7 (abonó 112 millones de euros). Esta transferencia mostró un signo de debilidad dentro del club puertas afuera y provocó un efecto cadena dentro del plantel.
Mateo Kovacic, en estado de rebeldía:
El futbolista no era tenido en cuenta por Zinedine Zidane y durante el Mundial expresó públicamente que su deseo era el de emigrar para tener más continuidad. Pese a que Lopetegui lo iba a utilizar, el croata se mantuvo firme en su postura y se declaró en “estado de rebeldía”, al amenazar con dejar de entrenar para forzar su salida.
La dirigencia del Real Madrid terminó accediendo a su pedido y lo cedió a préstamo sin opción de compra a Chelsea.
Luka Modric, el crack que no se siente valorado:
El mediocampista, que fue galardonado con el Balón de Oro en el Mundial de Rusia al llevar a Croacia a la final, cree que no tiene el reconocimiento que se merece dentro de la institución y se vio seducido por la propuesta del Inter.
Cuatro años de contrato por 10 millones de euros netos por temporada (más dos años opcionales en el Jiangsu de China) es la oferta económica de los italianos para el balcánico. Además, en caso de mudarse a Milano, compartiría plantel con sus compatriotas Sime Vrsaljko, Iván Perišić y Marcelo Brozović.
Modric habló con José Ángel Sánchez y le dejó en claro su intención de irse, mientras que el dirigente le contestó que simplemente lo dejarán ir si pagan 750 millones de euros. El mediocampista solicitó una reunión con Florentino Pérez, para reafirmar su deseo y recordarle al mandatario su promesa de dejarlo marcharse en caso de ganar nuevamente la Champions League.
Marcelo y su deseo de reencontrarse con su amigo Cristiano Ronaldo:
Otro que coquetea con la posibilidad de abandonar la institución es el lateral izquierdo. El brasileño, según la prensa italiana, dialoga cotidianamente con Cristiano y mira con cariño un posible desembarco en Turín (el delantero también le pidió a la dirigencia que hagan el esfuerzo por ficharlo). No obstante, la situación no parece sencilla: Juventus debiera vender a Alex Sandro y con ese dinero tratar de ir en búsqueda de Marcelo.
De la imposibilidad de contratar a Mbappe o Neymar a fichar a Courtois:
Tras la salida de Cristiano Ronaldo, Real Madrid tanteó el mercado para lograr un fichaje top para reemplazar al portugués; pero se encontró con la imposibilidad de cerrar a jugadores de la talla de Kilian Mbappe, Neymar o Eden Hazard.
Hasta el momento el refuerzo de más renombre que llegó a la capital española es el de Thibaut Courtois (le pagó a Chelsea 35 millones de euros), quien peleará por un puesto en el arco con Keylor Navas, una de las figuras del plantel.
Los motivos de cada uno de los casos son diferentes, van de no sentirse valorados a no encontrar motivaciones para continuar tras llegar a lo máximo y ganar 3 Champions League de manera consecutiva. Y aunque varios no tienen la mejor relación con Florentino Pérez, este es el primer mercado de pases en el que el Real Madrid noticia por las desvinculaciones o posibles salidas que por las contrataciones de nuevos futbolistas.
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Source: Infobae