Terminada la exitosa pero denostada trilogía de las Cincuenta Sombras, Dakota Johnson probablemente quiso cambiar de aire y pasó a protagonizar un proyecto muy diferente, Suspiria que resulta sin dudas más interesante y sugestivo que el superficial drama erótico en el que todas las sombras son la misma.
Pero también tuvo que pagar un cierto precio por esto.
«Tuve que empezar terapia» reveló tras finalizar el rodaje de Suspiria, el remake/ homenaje de Luca Guadagnino (director que viene de hacer la aclamada Call Me By Your Name) al clásico de horror de Dario Argento.
El rodaje de Suspiria , realizado en un hotel abandonado y frío en medio de una montaña, quiso reflejar la oscuridad «maliciosa e invernal» que según su director caracteriza a la película, y no fue una experiencia sencilla para la actriz, que ya había colaborado con Guadagnino en A Bigger Splash.
Tilda Swinton y Chloë Grace Moretz, coprotagonistas también de aquella película que es por el contrario sexy y veraniega (aunque no menos oscura), comparten el elenco con Dakota Johnson en Suspiria.
La nueva versión de Suspiria es uno de los proyectos más importantes de Amazon Studios, que ahora ha difundido su primer tráiler oficial y es apropiadamente espeluznante.