n estudio pionero de las universidades de Cambridge y de Copenhague identificaron la evidencia más antigua del virus de la hepatitis B (VHB), en restos antiguos de la Edad del Bronce hallados en los cementerios en Europa y Asia.
La importancia científica de la investigación ha sido descrita como “verdaderamente notable” y comparada con el descubrimiento de los primeros fósiles. Además, el estudio demuestra que los virus pueden extinguirse.
La nueva investigación, liderada por un grupo de académicos en el Centro de Evolución Patógena en el Departamento de Zoología de la Universidad de Cambridge y el Centro de GeoGenetics en la Universidad de Copenhague, tomó muestras genéticas de dichos restos antiguos.
Los científicos extrajeron las muestras de esqueletos en Europa y Asia desde la Edad del Bronce, hasta el período Medieval; en 12 de estos esqueletos, encontraron suficiente del genoma del VHB para realizar análisis detallados, el más antiguo de los cuales tenía 4 mil 500 años.
A partir de estos datos, pudieron extraer las secuencias genéticas del VHB que infectaron a los individuos hace miles de años.
Los hallazgos, publicados en la revista Nature y difundidos en la página institucional de la Universidad de Cambridge, presentan nuevos conocimientos sobre los orígenes y la evolución del VHB. Además, la composición genética de esta cepa podría tener implicaciones para mejorar las vacunas contra el virus.
Antes de este estudio, los virus humanos más antiguos que se descubrieron tenían aproximadamente 450 años.
La investigación fue dirigida por el profesor Eske Willerslev, que colabora tanto en la Universidad de Cambridge, como en la Universidad de Copenhague.
“El estudio nos da una idea de cómo se comporta este virus, y nos proporciona una mejor idea de lo que es biológicamente posible en el futuro. El análisis de otras muestras de ADN antiguas puede revelar más descubrimientos y este estudio pionero podría tener enormes implicaciones sobre cómo el virus afecta a los humanos hoy en día”, aseguró.
La investigación también muestra la existencia de genotipos HBV antiguos en lugares incompatibles con su distribución actual, lo que contradice los orígenes geográficos del virus previamente sugeridos.
Barbara Mühlemann, una de las participantes y estudiante de posgrado en la Universidad de Cambridge, destacó la importancia de estudio, ya que si bien el VHB es un problema de salud mundial, se sabe poco sobre su origen y evolución.
Como ocurre con muchos virus humanos, se tienen pocas evidencias históricas que han sido difíciles de localizar e identificar.
“Se ha tratado de descifrar la historia del VHB durante décadas; nuestro estudio transforma nuestra comprensión del virus y demuestra que afecta a las personas hasta ahora como la Edad de Bronce. También hemos demostrado que es posible recuperar secuencias virales de muestras de esta edad, lo que tendrá implicaciones científicas mucho más amplias”, detalló.
Terry Jones, primer autor conjunto del Departamento de Zoología de la Universidad de Cambridge, precisó que la mayor parte de los científicos estudian cepas modernas de virus y que hasta ahora no tenían conocimiento de las secuencias antiguas.
“Fue como tratar de estudiar la evolución sin fósiles. Si sólo estudiáramos los animales que viven en la actualidad, nos daría una imagen muy inexacta de su evolución, es lo mismo con los virus”, agregó.
Comprender más sobre el VHB ahora puede ser posible. Mostrar que el virus ha estado circulando en humanos desde al menos la Edad de Bronce es un gran avance científico, ya que los intentos previos para calcular cuánto tiempo ha infectado el virus a los humanos, han oscilado entre 400 años y 34 mil años.