Hay que ser muy mala persona para querer estafar un conductor de Uber, cuando esta aplicación nos ha prometido tarifas algo más bajas y algunos beneficios que los taxis no tienen. Si antes estábamos preocupados de que el conductor no nos cobrara demás, ahora son ellos los que se deben preocupar.
Una mujer ebria se subió a Uber y canceló el viaje en medio de la ruta, tratándolo de engañar para que le diera un viaje gratis.
Afortunadamente, Ryan captó el movimiento de la usuaria en una cámara que tiene instalada en su auto. En total, el viaje era de $10 dólares.
Después de unos minutos del traslado, una notificación alerta a Ryan de que el pasajero a cancelado el viaje, por lo que detuvo el vehículo y le preguntó a la usuario por qué lo hizo.
En vez de reconocer el error, con actitud de borracha, trata de justificar su acto. Ryan la obligó respetuosamente a bajar del auto. Pero ella no estaba para eso a esas horas y las cosas se pudieron feas.
La mujer estaba evidentemente avergonzada de ser pillada en el acto, pero en vez de disculparse, hizo todo peor diciendo que ella estaba bien. Ella lo amenazó le pondría una estrella, mientras que él le dice que tiene todo grabado, a lo que ella respondió con golpes.
Source: UPSOCL
