Mitos y realidades de visitar un hotel de paso
Desciframos los grandes misterios de la humanidad para que tengas una idea informada de lo que significa visitar un H.
Uno de los aspectos más importantes en las relaciones de pareja es la privacidad que ambos pueden compartir para con ellos mismos. Está muy bien ser una pareja sociable y salir con amigos para ir a fiestas juntos, pasar el tiempo en plazas públicas, y elegir lugares ricos para comer, vaya, lugares donde se les pueda ver que respiran amor y que son el uno para el otro. Aunque no siempre lo sean.
Sin embargo, insisto, la privacidad es uno de los elementos sustanciales para la felicidad y la durabilidad de las relaciones sentimentales de pareja. En los momentos más privados es donde también se conocen los aspectos o hábitos más significativos de las personas, y por ello hoy queremos presentarte mitos y realidades de visitar un hotel de pasó con tu pareja.
Cómodo ingreso
Encontraras hoteles por toda la ciudad, por lo que es posible hablar de un contexto general cuando decimos que siempre habrá un momento idóneo para entrar sigilosamente por esa puerta que se desliza suavemente.
Es falso que la mayoría de los hoteles comprometan tu privacidad, por lo general disponen siempre luz tenue al ingresar, o con un cristal polarizado a la hora de pagar, esto para que tengas que tener el menor contacto con la persona que administra tu acceso a la habitación.
Higiene
La higiene seguramente también es un aspecto esencial para ti, y uno de los aspectos fundamentales a considerar para visitar o no uno de estos espacios. Algunos son previamente sellados, sinónimo de que pasaron por controles de limpieza antes de entregarte la habitación. El baño, los botes, y el lavabo, tendrán un sello del hotel, distintivo de que fueron lavados previamente su préstamo.
Ruidos extraños
Muchas parejas nunca han explotado realmente su vida sexual con su pareja porque nunca han tenido un encuentro donde tengan libertad total de expresarse y de satisfacer por completo sus deseos por miedo a ser cachados por terceras personas, o porque hacerlo en lugares prohibidos no es buena idea para alcanzar un nivel profundo de placer, pues este requiere paz.
Un hotel cubre estas necesidades. Si estás buscando tener un momento, incluso si no es intimo o no tiene que ver con una función sexual, un hotel cumple la expectativa de ofrecer un espacio de comunicación para la pareja. Se puede dialogar sin el ajetreo de las calles, y todo lo demás, expertos aseguran, vendrá después…
Costos
Los costos en la ciudad pueden ser muy variados, sin embargo, pensar que pagar por un hotel económico es una idea mala es también un gran mito. Es posible que en algunos casos con 200 pesos o más puedas pagar por una habitación sencilla en un hotel limpio, en una ubicación de mediano pelo y alrededor de 6 a 8 horas, aproximadamente.
Malas experiencias
Por supuesto, también es importante hablar de las malas experiencias que llega uno a experimentar cuando decides visitar un hotel de pasó. Se habla de cosas o de detalles menores como la falta de papel, ausencia de canales de pornografía, etc.
¿y tú, que añadirías a esta lista?
Para hoy domingo:
Titanus Giganteus, CONOCELO aquí