JERUSALÉN (AP) — El gobierno israelí colocó el domingo cámaras de seguridad en un importante sitio sagrado de Jerusalén, en medio de la ola de violencia registrada el fin de semana.
El presidente palestino anunció que congelará las relaciones con Israel en protesta por la reciente instalación de detectores de metales en la zona.
Israel instaló los detectores la semana pasada en el Monte del Templo con la intención de prevenir nuevos atentados, como el ocurrido días antes en el que un grupo de árabes armados mató a dos policía israelíes.
En protesta por la instalación de los detectores, líderes religiosos musulmanes encabezaron una oración masiva el viernes porque consideran que el gobierno israelí trata de expandir su control a los sitios administrados por musulmanes.
El Monte del Templo o Explanada de las Mezquitas, administrado por musulmanes, es el lugar más sagrado de judaísmo y uno de los más importantes para el islam.
Como parte de las tensiones surgidas por la medida, miles de musulmanes se enfrentaron el viernes a los cuerpos de seguridad de Israel en Cisjordania y en Jerusalén. Al menos tres palestinos murieron.
Un hombre palestino mató a puñaladas el viernes a tres miembros de una familia israelí en uno de los asentamientos en Cisjordania.
El presidente palestino Mahmud Abás anunció el domingo que congelará las relaciones con Israel “a todos los niveles” hasta que los detectores de metales sean removidos.
Abás detalló, citado por la agencia oficial de noticias palestina Wafa, que la suspensión de relaciones incluye la coordinación de las fuerzas de seguridad en Cisjordania, las cuales han sido vitales para reducir las tensiones en la zona.
El ministro de Defensa israelí Avigdor Lieberman aseguró en declaraciones al sitio web de noticias YNet que los vínculos entre las fuerzas de seguridad son más beneficiosas para los palestinos que para Israel.