Perder peso depende de los hábitos en el estilo de vida. La dieta, el descanso y la actividad física son algunos factores que contribuyen a perder o mantener el peso adecuado conforme a la edad y sexo. Sin embargo, hay una serie de causas que, por más esfuerzo haga una persona, impiden bajar los kilos de más en el cuerpo.

Si has hecho lo posible por perder peso y no lo logras, tal vez es momento de analizar lo que pasa en tu vida para encontrar una repuesta y cambiar las causas que te impiden tener un peso corporal saludable. En algunos casos puede deberse a cuestiones hormonales que requieren de un tratamiento médico eficaz.

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Factores que te impiden perder peso

Estrés: en el último año, la mayoría de las personas han experimentado episodios de estrés y de ansiedad constantes a consecuencia de la pandemia por coronavirus. Esta reacción fisiológica altera significativamente el metabolismo, elevando los niveles de azúcar en la sangre. También puede afectar el comportamiento de las personas al refugiarse en la comida, es decir, el hambre emocional.

Alcohol: en su mayoría, las bebidas alcohólicas aportan altas dosis de calorías que, al consumir constantemente, provocan sobrepeso e impiden la pérdida de peso. Lo adecuado es limitar la ingesta de alcohol, si es que quieres tener éxito la próxima vez que te subas a la báscula. Como en todo alimento es importante respetar las porciones y el alcohol no es excepción.

Nivel de actividad: aunque parece obvio que el ejercicio regular es clave para perder peso, algunas personas limitan la actividad física durante el día o, en otros casos, entrenan sin descaso; en ambos casos las consecuencias son negativas para la salud del cuerpo. El sedentarismo es el enemigo número uno del organismo, mientras que el exceso de ejercicio puede no tener el resultado deseado por no ejecutarlo de la manera correcta. Busca un equilibrio y actívate.

Apoyo: la pérdida de peso que implica ser solidario con la persona que comienza a trabajar para lograr su objetivo, por lo que resulta de gran importancia el apoyo que recibe de familiares y amigos cercanos, aumentado su motivación y autoestima para trabajar duro durante todo el proceso.

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Perder peso puede convertirse en un trabajo en equipo, haciendo comunidad para compartir entrenamientos, dietas y los resultados que cada miembro obtenga de su intenso trabajo constante. Involucrar a la familia en el nuevo estilo de vida saludable tendrá mejores resultados en los próximos años.