Ayer la justicia noruega condenó a 21 años de prisión (sentencia que puede ser prorrogable) al ultraderechista Philip Manshaus, acusado de asesinar a su hermanastra de origen asiático y también de llevar a cabo un atentado en una mezquita. Es el segundo ultraderechista en ser condenado a esa pena en el país escandinavo.
El ultraderechista el 10 de agosto asesinó a su hermanastra de origen asiático de varios disparos en la cabeza con un rifle en el departamento que compartían en Bærum a las afueras de la capital de Noruega.
Después se dirigió en coche, armado, al centro islámico Al Noor y aunque atacó el recinto a balazos no logró herir ni matar a nadie. Fueron dos ancianos quienes lograron someterlo y detenerlo hasta que pudieron entregarlo a la policía.
Al realizar el ataque el ultraderechista llevaba un casco con una cámara, como lo hiciera el atacante de las dos mezquitas en Christchurch, Nueva Zelanda evento en el que fallecieron 49 personas.
Al respecto de estos hechos Manshaus declaró que lo hizo en defensa de la “raza blanca“.
La jueza Annika Lindstrom señaló sobre Manshaus: “El acusado ha dicho que su intención era matar a la mayor cantidad posible de musulmanes en la mezquita y que siente no haber conseguido matar a nadie de las personas que estaban allí”.
Manshaus es el segundo ultradertechista condenado en Noruega a 21 años, con sentencia prorrogable, ya que en el 2011 se condenó a Anders Behring Breivik por el atentado que perpetró también en Olso.
Breivik primero hizo estallar un vehículo en un complejo gubernamental noruego, hecho en el que fallecieron ocho personas, y después se dirijió a un campamento de las Juventudes Laboristas donde asesinó a 69 personas.
