El sacerdote católico y defensor de derechos de los inmigrantes, Alejandro Solalinde, manifestó que no tiene en sus planes dejar su activismo para ser funcionario público, por lo que dejó ver su negativa a la invitación que le ha manifestado el virtual presidente de electo de México, Andrés Manuel López Obrador, para que ocupe la titularidad de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH).
Soy un misionero de pie, me veía como funcionario y pues no me veía, no puedo ser funcionario”, expresó y aprovechó para aclarar que su puesto como miembro de la iglesia no es incompatible con un cargo en la CNDH y no se rompería el Estado de Derecho.
Solalinde afirmó que López Obrador ya conoce su decisión y le propuso a Elizabeth Lara Rodríguez, coordinadora de la oficina de la CNDH en Oaxaca, para el puesto.
La licenciada Elizabeth (Lara Rodríguez), quien es una persona íntegra (…), que tiene vocación de servicio, que ha batallado con nosotros. Para ella no ha habido horarios, no le interesa el dinero. (…) Por eso me honra presentárselas y decirles que Andrés Manuel (López Obrador) se sentirá muy honrado. Esta mañana le notifiqué a él, al presidente electo (mi decisión)”, indicó.
Cabe recordar que en mayo pasado López Obrador declaró que buscaría a Solalinde para encabezar la defensa de los derechos humanos y también a Javier Sicilia para integrarlo a la Comisión Nacional de Personas Desaparecidas.