Esta viernes, los rumores que venían acumulándose desde el inicio de la semana se oficializaron mediante una publicación en redes sociales del famoso club Los Ángeles Galaxy, de Estados Unidos. Zlatan Ibrahimovic era una realidad. El sueco finalmente había abandonado Old Trafford, con algunas voces que apuntaban a desencuentros con el portugués José Mourinho.

Sea cual sea la razón que haya empujado su migración a través del Atlántico, Zlatan se hizo notar de inmediato en piso norteamericano, incluso antes que las plataformas del club hicieran su parte en internet.

Esa misma mañana, Los Angeles Times, un tradicional periódico angelino -el tercero más leído en Estados Unidos-, mostró en la portada de deportes al flamante fichaje, pero junto a esa página, había otra muy especial, comprada por el mismísimo Ibra. 

Querida Los Ángeles,

De nada. 

Sí, el sueco se dio el gusto de dar otra muestra de su característico ego, y respondió los agradecimientos por adelantado. Zlatan confía con dejar su marca en el elenco hoy dirigido por Sigi Schmid.

Y convengamos que así ha sido en prácticamente todos los clubes en que ha jugado. Con una carrera que se inició en el Malmö sueco, explotó en el Ajax y dejó pinceladas de su talento en Juventus, para luego timbrar su marca definitiva en el Inter de Milán. Por si no fuera suficiente ya, con 9 títulos locales en el bolsillo, partió a Barcelona, donde quizás no brilló tanto sólo por la presencia de un gigante como Messi. AC Milan y París Saint Germain vinieron a confirmar que lo del sueco era incombustible. Y con ello 17 trofeos domésticos más, y dos copas internacionales con los catalanes.

Pero le quedaría una deuda, que saldaría a medias en su última aventura en el Manchester United, donde brilló con luz propia en un elenco que no lo hacía hace tiempo. Conquistó la Europa League del 2017, en Suecia, su casa, como consuelo de una Orejona que nunca llegó. 

Porque seamos honestos, con el traspaso al equipo norteamericano por un sueldo de casi 2,5 millones de euros, Ibra, ya de 36 años, apagó la última oportunidad que pudo tener. Y lamentablemente no estuvo en cancha para pelearla.

Pero hoy, vuelve al césped, uno de vibra distinta, pero en donde un genio como él, destacará sin duda alguna. Y con ello asoma otra interrogante, en especial cuando estamos a 82 días de la Copa en Rusia, ¿volverá a portar la jineta? Recordemos que el sueco se retiró de la selección tras la Euro de Francia 2016, pero hace unas semanas declaró extrañarla y barajó sus posibilidades de asistir  Mundial. Incluso dijo que la puerta no estaba cerrada. Antes, previo al choque por repechaje ante Italia, declaraba que su “historia con la selección nacional” estaba “terminada”.

¿Jugará su tercer mundial? Los hinchas queremos ver a Zlatan, siempre.

Source: UPSOCL