Cuando éramos pequeños, todos teníamos a un niño o niña que era más fuerte que los demás. Siempre solía ser ese compañero más alto que el promedio del curso o quizás solamente más corpulento; él era ese niño que siempre hacía más flexiones de brazo en la clase de educación física y, además, podría incluso hacer bullying a otros niños.
Pero si ahora hacen el ejercicio para recordar el niño más fuerte que han conocido, pueden estar seguros de que ese chico es un debilucho. Porque seguramente sería vergonzoso el peso que podría levantar en comparación con la ucraniana Varya Akulova, también conocida como la “niña Hércules”.
La “niña más fuerte del mundo” comenzó a levantar pesas cuando tenía apenas cuatro años. A los 8, cuando pesaba sólo 40 kilos, ya lograba levantar increíbles 100 kilogramos .
Pero a los 12, siendo tan sólo una pre-adolescente, Akulova ganó fama porque ya podía levantar a cuatro hombres de una vez e incluso logró una nueva marca personal al cargar más de 240 kilogramos.
Con el tiempo, pudo incluso levantar a varias personas a la vez y, junto a ellas, alzar pesas también. Y no sólo usando sus manos, sino incluso su cuello…
Me imagino que, al ver esto, ningún compañero osaría molestarla ni desafiarla a una disputa de gallitos.
Posiblemente todo se debió a una genética privilegiada, pues su padre también era un “strongman” – pesista que se dedica a levantar extremas cantidades de peso.
De hecho, los pesistas de ese tipo pueden llegar a levantar objetos de más de 300 o 400 kilogramos. Juntos, los dos participaron de competencias de pesas y shows de talentos en televisión. Y ganaron muchos títulos.
¿Pero acaso fue ese el destino que eligió Varya para el resto de su vida? Finalmente, no.
Han pasado 13 años desde que Akulova se hizo mundialmente famosa y, hoy, a sus 25 años, mantiene una vida de perfil más bajo y se ve muy distinta. Y aunque sigue ejercitándose y dedicando mucho tiempo a las pesas, su labor no es tan extrema como antes.
Las pesas siguen siendo su pasión, pero ahora ella es una profesional del entrenamiento físico.
Y a pesar de su fuerza cuando era niña, muchos en el pasado se preocupaban por las grandes cantidades de peso que cargaba con su cuerpo tan pequeño. Afortunadamente, no ha tenido ninguna secuela o problema físico debido a esas actividades (al menos hasta ahora).
De esa manera, en su adultez decidió tomar un camino en el cual podrá, quién sabe, sacar adelante otros niños y jóvenes tan fuertes como ella.
Source: UPSOCL
