Los escasos recorridos de la Ruta 15 en Zacatecas están provocando un aumento en la inseguridad de los pasajeros. Viajar en la Ruta 15 San Ramón-Villas-Quintas, de Guadalupe, se ha vuelto peligroso para los usuarios.
En Zacatecas, un hombre llamado Juan Jiménez, que es mayor, ha expresado su descontento con el servicio de transporte en la Ruta 15 San Ramón-Villas-Quintas, en Guadalupe, ya que considera que viajar en ella es una experiencia muy desagradable.
Don Juan mencionó que recientemente tomó un autobús de la ruta que se encuentra cerca del mercado Soriana de Sauceda de la Borda con destino a Quintas. Este hombre vive cerca de la avenida Américas, donde tiene su casa ubicada cerca de la Uneme-Dedicam.
A pesar de ello y como es habitual, esperaba llegar a su casa en aproximadamente 15 a 20 minutos, que es el tiempo que los conductores de esa ruta suelen tardar en completar el recorrido.
Sin embargo, no ocurrió de esa manera. Al llegar a la esquina de Américas, cerca de Villas de Guadalupe, el conductor, de manera grosera y agresiva, le dijo que no iba a seguir hasta Américas, por lo que el pasajero tuvo que bajarse en ese lugar.
El hombre de setenta años contó que, lamentablemente, tuvo que caminar aproximadamente dos kilómetros desde Villas hasta la Uneme y que fue asaltado poco después de bajar del vehículo.
El agredido, sintiéndose muy nervioso, mencionó que no podía recordar el número del transporte en el que viajaba, pero sí que había perdido sus pertenencias y parte de su aguinaldo, el cual había ganado trabajando como ayudante en un taller mecánico.
Junto a esto, son numerosas las quejas de los usuarios de esa ruta debido al maltrato por parte de los jóvenes que realizan los recorridos, quienes deciden pasar a la hora que mejor les convenga, especialmente los domingos, cuando el servicio es limitado.
Los conductores manejan a altas velocidades sobre los reductores de velocidad, poniendo en peligro a personas mayores, niños y mujeres embarazadas.
Adicionalmente, otra residente resaltó que los conductores de los vehículos son muy agresivos, generalmente van acompañados de alguien más, utilizan sus teléfonos móviles mientras manejan, reproducen música con contenido violento a un volumen muy alto y, además, ponen en peligro la vida de los ancianos, tal como se menciona en el caso específico.
