Vía Clarín
La tensión en Zimbabwe cada vez es más notoria, ya que ingresaron tanques a la Capital del país africano, y ejército mandó un ultimátum al presidente Robert Mugabe, a razón de la destitución del vicepresidente Emmerson Mnangagwa, lo cual originó una disputa con las fuerzas armadas y el ejecutivo. Reportes de medios locales indicaron que tanques y militares ingresaron a Harare, capital de Zimbabwe. El jefe del ejército, Constantito Chiwenga, advirtió al presidente Mugabe el cese a la depuración del vicepresidente y tomar "medidas correctas" para las expulsiones. Chiwenga ofreció una conferencia de prensa en la capital para mencionar que el partido del líder del ejecutivo ZANU-PF, infiltró "contrarrevolucionarios" para entregar a la nación a viejas fuerzas coloniales. El ultimátum fue enviado una semana después de la destitución de Mnangagwa, un veterano de guerra y supuesto sucesor, explicó el Diario Clarín. Aclaró que cuando las fuerzas de liberación se encuentran amenazadas, estos deben ejercer un correctivo, "la actual purga que está claramente apuntando a miembros del partido con un pasado de lucha por la liberación debe parar inmediatamente", dijo. El vicepresidente Mnangagwa huyó a Sudáfrica, porque recibió amenazas y sentenció que pronto tendrán el poder de "nuestro bello partido y país". La esposa de Mugabe, Grace Mugabe, fue determinante para la expulsión de Mnangagwa tras meses de ataques verbales; las declaraciones de Chiwenga fueron un ataque directo, dirigidas al partido de ZANU-PF alineado con la pareja de Mugabe. Grace Mugabe tiene 52 años, sus aliados no ayudaron a la liberación de Zimbabwe y suena ahora como la futura vicepresidenta del país. Con información de Clarín.
Source: Radio Formula
