Ximena García Ixtapan de la Sal y Villa Guerrero lideran la tasa de incidencia de niños con paladar hendido, debido a la exposición de sus habitantes a los plaguicidas, aunque esta malformación no es exclusiva de estos municipios, ya que en el estado nacen dos niños por cada 150 mil con este padecimiento, por lo que ocupa el segundo lugar nacional.A la exposición a químicos, se suman factores como la mala nutrición durante el embarazo y la carga genética, lo que provoca que el labio o la boca del bebé no se formen adecuadamente durante el embarazo.Entre las consecuencias del labio y paladar hendido, además de las estéticas, resaltan la insuficiencia de peso, afectaciones respiratorias y pulmonares; problemas con alimentación, retardo en el crecimiento y dificultad en el habla.Édgar Garduño Mejía, jefe de cirugía maxilofacial del Centro Médico Lic. Adolfo López Mateos, señaló que esta anomalía es detectada después del primer trimestre del embarazo y es más común en varones, por lo que resulta fundamental el cuidado prenatal, ya que el bebé necesitará más de una cirugía. El Instituto de Salud lleva a cabo dos jornadas quirúrgicas al año, por lo que en los últimos nueve años, 540 pequeños han sido beneficiados con el tratamiento sin costo alguno, a través del Seguro Popular, ya que en el sector privado corregir esta malformación es de entre 200 y hasta 500 mil pesos.Durante febrero, el Instituto de Salud del Estado de México llevó a cabo la décimo primera jornada de cirugía extramuros en beneficio de 28 niños, quienes tendrán que tener un seguimiento médico. leer más
Source: El Gráfico