La actriz Eiza González usó un blackface cuando tenía 15 años, mientras interpretaba la telenovela “Lola, érase una vez”
Eiza González volvió a formar parte de la polémica en las redes sociales luego de que una usuaria de Twitter publicara unas fotos en las que ella aparece con la cara pintada de negro y con los labios pintados de rojo.
Este gesto es considerado como racista por algunos usuarios quienes le reclamaron hipocresía en sus opiniones pues la actriz mostró su apoyo al movimiento de Black Lives Matter.
Las imágenes fueron tomadas cuando la actriz tenía 15 años, época en la que participaba en la telenovela “Lola, érase una vez”.
El tema causó polémica pues hubo encontronazos entre usuarios que pidieron que la actriz se disculpara y otros que dijeron que no era motivo de racismo.
En esa época, la actriz Eiza González era menor de edad y se encontraba interpretando algo que ya estaba escrito en un guión y por lo tanto no era su responsabilidad.
Respecto a esta situación, la misma Eiza González dijo al portal US Weekly que se encontraba arrepentida de haber hecho el performance (conocido como Blackface).
También menciono que en ese momento no tenía el poder para decidir sobre sus papeles porque era menor de edad y su poder de negociación era poco o casi nulo para con los productores de la telenovela.
Siento mucha vergüenza y me siento apenada por haber utilizado el maquillaje en un blackface que aparece en algunas fotos que circulan por ahí. (…) Era una actriz de 15 años y era mi primera telenovela mexicana en la que participaba, fui presionada contra mi voluntad.
Eiza Gonzalez también añadió que hubiera querido tener el conocimiento y la voz que tiene ahora para poder negarse a usar un maquillaje que, para algunas personas, es considerado como un fuerte epíteto racista.
La actriz reiteró que su intención nunca fue ofender a ninguna persona ni cultura y que ella misma ha tenido que lidiar con aspectos del racismo durante su carrera como actriz:
Nunca participaría de forma intencionada en nada que tuviera que dañar o afectar la sensibilidad de otra persona (…) más que disculpas, es mi responsabilidad educarme a mi misma para poder usar mi voz y ayudar a quienes se levantan contra las injusticias. Una vez más me disculpo sinceramente si ofendí o dañe a alguien con mis acciones.
